Freixenet se suma al auge de los Proseccos y ya tiene su primer Prosecco en el mercado español. Con este nuevo producto de categoría Premium la firma pretende llegar a nuevos públicos y, en especial, al consumidor joven. Este nuevo vino amplía la cuota de mercado del vino espumoso, fortaleciendo toda la categoría.
Freixenet ha lanzado en el mercado español su Freixenet Prosecco. Sobre la entrada de la empresa «en este sector de rápido crecimiento» dicen que «es una respuesta a la enorme demanda de este popular vino por parte del consumidor» y refleja su fuerte apuesta «por consolidarse como el líder mundial de los espumosos».
El Prosecco de Freixenet y su alcance en diferentes mercados
Freixenet Prosecco explica que es un producto fresco, ligero y moderno de categoría Premium, elaborado con las mejores uvas Glera de la región italiana de Véneto. Con este vino, la compañía amplía su experiencia en el sector para llegar a nuevos públicos y atraer al consumidor más joven y a los Millennials con el fin de acercarles al mundo de los espumosos.
Consideran que este vino espumoso «ayudará a dinamizar el mercado español tras su probado éxito desde el lanzamiento en el año 2017 y su posterior comercialización en Reino Unido, Finlandia, Suecia, Brasil y Canadá». En el primer año de su lanzamiento, Freixenet Prosecco registró unas ventas de 1,7 millones de botellas.
Al mismo tiempo que en España, Freixenet Prosecco ha iniciado su comercialización este otoño en Estados Unidos y Japón al ser mercados donde la compañía tiene un reconocimiento de marca destacado y dispone de amplias oportunidades de crecimiento. Por ello, Freixenet Prosecco supone la nueva apuesta por la innovación, el liderazgo y la internacionalización del grupo líder mundial en espumosos.
Con una tendencia al alza que se mantendrá en los próximos años, este vino prosecco está considerado el producto motor de la categoría de vinos espumosos en todo el mundo que ayudará a dinamizar el mercado y a impulsar el consumo del cava, ya que ambas bebidas son complementarias. Prueba de ello es el buen comportamiento de Reino Unido, considerado el primer mercado para Freixenet Prosecco, en el que el volumen de esta bebida ha sido incremental al de Freixenet Cava. Por su parte, en Finlandia, en 2017 Freixenet logró ser la primera marca española en vinos espumosos y la número 1 de Prosecco; lo que supuso un crecimiento del 23% de Grupo Freixenet.
Este Prosecco de Freixenet viene a ampliar la oferta de la compañía que también iniciará la comercialización del nuevo espumoso Freixenet Italian Rosé, «una deliciosa combinación de los mejores racimos de Glera y Pinot Noir que se cosechan en Italia y lo convierten en un vino para disfrutar solo o como un refrescante maridaje con cualquier comida». En este sentido, las diferentes modalidades de vino espumoso convivirán en el mercado ya que tienen características distintas y van dirigidos a segmentos diferentes. En la firam vitivinícola consideran que esta «estrategia permite complementar unos productos con otros adaptándose a las necesidades de los consumidores».
En palabras de Pedro Ferrer, consejero delegado de Freixenet, “como líderes del mercado de vino espumoso, nuestro reto es seguir innovando para competir en las grandes ligas a nivel mundial. Con la llegada y paulatina internacionalización de Freixenet Prosecco, contribuiremos también al impulso de toda la categoría de vino espumoso. El prosecco es una oportunidad para el cava”.
El proceso de elaboración
Para la elaboración de Freixenet Prosecco, la uva entera es presionada con delicadeza y el mosto empieza así un proceso de lenta fermentación en frío, para así conservar mejor los delicados aromas y la frescura de la uva. Mientras, la segunda fermentación tiene lugar en depósitos de acero inoxidable presurizados a temperatura controlada para, unas semanas más tarde, obtener un espumoso de color amarillo pajizo con viva efervescencia y aromas frescos a cítricos, manzanas y flores.
Este espumoso, que en el paladar es limpio y fresco con notas de limón maduro, manzana verde y pomelo, llega al mercado a un precio que oscilará entre los 10€ y los 12€ con un packaging superior. Resaltan que su botella de cristal tallado «lo convierte en una joya para celebrar con estilo los pequeños y grandes momentos de la vida».