Los Vinos Singulares de Viña Pomal son una gama que responde perfectamente a su nombre, cuya idea es que la uva exprese su personalidad. Son fruto de la experimentación y la inquietud por mejorar en la elaboración de los vinos del equipo de Bodegas Bilbaínas. Esta colección está compuesta por vinos (dos tintos y dos blancos) de Tempranillo Blanco, Garnacha, Graciano y Maturana.

“Viña Pomal Vinos Singulares” es una de las propuestas que ofrece esta bodega riojana y que son fruto de microvinificaciones de parcelas únicas, originados tras probar nuevas variedades, nuevas microzonas y tras la experimentación de la que se benefician el resto de gamas de la bodega. Con el propósito de respetar al máximo la personalidad de cada uva y de cada origen, son vinos de poca intervención y para aprender. Esa es su filosofía.
2012 fue el año en que vieron la luz los primeros vinos de esta colección, que lograron grandes premios y reconocimientos, según explican desde Viña Pomal. Son vinos de edición limitada, de aquellas variedades que el enólogo de Viña Pomal, Diego Pinilla, considera que poseen la calidad óptima para sorprender en el mercado.

Tempranillo Blanco Reserva 2013, un vino de una uva «mutante»

La variedad Tempranillo Blanco se encontró hace unos años como una mutación genética natural del Tempranillo Tinto, localizada en 1988 en Murillo del Río Leza. Recientemente se autorizó su plantación, y por eso en Viña Pomal han querido empezar a estudiar su potencial. La consideran una variedad adecuada para zonas frescas, con una maduración precoz. «A la expresión fresca de flores blancas y cítricos, sumamos la complejidad del envejecimiento en barricas de roble«, detallan.
Tras la maceración de 8 horas con los hollejos, se lleva a cabo la fermentación en barrica (15 ºC), trabajando con batoneados durante los primeros 4 meses. Tiene una crianza total de 12 meses en barricas de roble francés nuevo y americano de un uso y una crianza mínima en botella 12 meses.
El consejo del enólogo: «un vino que mejorará en botella por varios años».
Nota de cata
Aspecto: amarillo brillante, con reflejos verdosos.
Nariz: flores blancas y albaricoque, miel y notas especiadas del paso por barrica. Elegante y fresca.
Boca: Vibrante, fresca, mineral.
Maridaje
Complemento perfecto de platos especiados, marisco o pescados.

Garnacha 2012

Esta Garnacha quiere demostrar el potencial aromático de una variedad que es la más plantada en el mundo, dicen desde la firma. «Buscamos una garnacha de zonas altas, que tenga frescura y toda su potencia frutal, con gran volumen. Que sea armoniosa, sin pecar de excesos».
La garnacha es una variedad delicada, que exige un trato extremadamente cuidadoso en la bodega. Se hace una premaceración en frío, con una fermentación y maceración cortas (total 10 días encubado). La utilización de la madera busca proteger la delicadeza de la garnacha. El 50% del vino terminó la fermentación alcohólica en barrica francesa, con sus lías durante toda la crianza. El resto se crió 10 meses en barricas de roble americano de un año.
El consejo del enólogo: no recomienda ni considera necesario decantar este vino.
Nota de cata
Aspecto: color brillante, con reflejos violáceos.
Nariz: Fragante y delicado, se mezcla con intensidad los frutos (arándanos, frambuesa) con flores (jazmín, violeta) y un recuerdo a manzanilla.
Boca. Con gran volumen y frescura, con tanino aterciopelado. Paso por boca amable y sedoso con final envolvente y graso.
Maridaje
Complemento perfecto de platos que contienen verduras, de arroces, quesos, pato y pescado azul.

Graciano 2010

El Graciano es una variedad autóctona de Rioja, muy poco extendida (alrededor de 600 hectáreas en Rioja). De ciclo largo y maduración tardía se caracteriza por un intenso color y alta acidez, tradicionalmente complementaria del tempranillo en «coupages» de vinos de reserva y gran reserva, donde aporta longevidad. Este ciclo largo hace que en nuestros viñedos de fuerte influencia atlántica, solo madure bien en años calurosos o de especial bonanza durante la vendimia (como en caso del 2010). Este vino procede de nuestros viñedos en Haro, de suelos arcillo calcáreos.
En la vendimia se realizó una selección para llevar sólo a la bodega aquellas uvas con condiciones de maduración óptimas. Se sometió a dos selecciones, primero el racimo y luego el grano tras el despalillado. La maceración fue de 21 días y se fermentó a 26ºC, intentando extraer con suavidad. El vino se crió en roble francés nuevo durante 20 meses.
El consejo del enólogo: no recomienda ni considera necesario decantar este vino. Tiene un gran potencial de envejecimiento.
Nota de cata
Aspecto: Color rojo intenso y muy brillante.
Nariz: Aparecen aromas varietales: pimienta blanca, sándalo y cedro entremezclados con aromas de frutas rojas maduras y florales como la lavanda.
Boca: Con una acidez característica de la variedad Graciano, es envolvente, elegante y potente a la vez, intenso, equilibrado y persistente.
Maridaje
Quesos curados, mariscos, aves y guisos especiados.

Maturana Blanca 2014

Este vino se acaba de incorporar a la gama de Vinos Singulares este año. A la Maturana Blanca también se la conoce por el nombre de Ribadavia. Se aprobó su uso en la DOCa Rioja en 2007, aunque es la variedad más antigua de la que se tiene conocimiento escrito en Rioja, pues se cita ya en 1622. Es una variedad de buena fertilidad, presenta un racimo pequeño y bayas elípticas, también de tamaño pequeño. Es precoz en su desarrollo, y es destacable por su bajo pH, con alto contenido en ácido tartárico y bajo en potasio. Presenta el inconveniente de su alta sensibilidad a la botrytis, por lo que es exigente en su seguimiento.
Se macera ocho horas con los hollejos, y fermenta a baja temperatura (12-15 ºC). Se trabaja sobre lías en depósito durante 6 meses. En este primer trabajo, se ha fermentado en depósito, buscando identificar los aromas varietales. No se realiza fermentación maloláctica.
La fermentación es espontánea en barricas de roble americano nuevas. Trabajo de lías durante 3 meses. Posteriormente se crió en roble francés durante 4 meses.
Nota de cata
Vino brillante, amarillo con ligeros matices verdosos. Predominan los cítricos, acompañados de aromas manzana verde y los tostados del roble.
Vino intenso, muy fresco, bien equilibrado y persistente, que envejecerá bien en botella.