La bodega boutique Barcolobo que se encuentra en la reserva natural “Riberas de Castronuño-Vega del Duero” en Valladolid busca hacer vinos «donde la armonía entre fruta y madera represente un equilibrio capaz de conquistar el paladar de los consumidores» según destacan desde la bodega. Están acogidos a Vinos de la Tierra de Castilla y León y son: Barcolobo Doce Meses, Barcolobo Lacrimae Rerum, Barcolobo Barrica y Barcolobo Verdejo.
Con el propósito de elaborar un vino diferente nació Barcolobo que en el año 2001 buscaba cumplir el viejo sueño de recuperar la tradición vitivinícola que hubo en La Rinconada. Ese es su origen y partir de ahí se reconvirtieron las parcelas más idóneas en viñedos y se rehabilitó una antigua panera y almacén de grano, que en la actualidad alberga las instalaciones de la bodega. Este lugar de larga tradición agraria, ganadera y cinegética está enclavado en la Reserva Natural «Riberas de Castronuño – Vega del Duero» y en este lugar espacio privilegiado se encuentran los viñedos y la bodega.
Desde la bodega con base en Valladolid hablan de que su objetivo es «elaborar un vino diferente, huyendo de los cortes clásicos, donde la armonía entre fruta y madera representen un equilibrio capaz de conquistar el paladar de los consumidores».
El buque insignia, Barcolobo Doce Meses
Este vino con 12 meses de crianza en barrica de roble francés ha sido elaborado con una selección de las mejores uvas de tempranillo, syrah y cabernet sauvignon de la vendimia 2013, un año que se caracterizó por una primavera lluviosa y por un retraso general en el ciclo de maduración.
Acorde con la filosofía de la bodega, Barcolobo ha sido elaborado siguiendo criterios sostenibles en viticultura y con un máximo respeto hacia la uva, de hecho, cada variedad (y parcela) ha sido vinificada por separado y ha permanecido un mínimo de 12 meses en barricas de roble francés de tostado medio y grano muy fino. No es hasta el final, tras las correspondientes catas, cuando se ha producido al ensamblaje final del vino.
Barcolobo 2013 presenta un color rojo picota intenso con matices azulados. En nariz es frutal, con notas especiadas y muy aromático. En boca es sabroso, de taninos redondos, con buena acidez y toques dulces de madera. Largo retrogusto y fácil de beber.
La primera añada de este vino se presentó en el mercado en 2007. Barcolobo indica que «desde entonces se ha posicionado como el vino de referencia de la bodega, tanto por su elegancia y equilibrio, como por su relación calidad/precio@.
La añada 2013 de este tinto que salió al mercado en junio de 2017 llega al mercado con el reconocimiento de uno de los concursos internacionales de mayor relevancia en el sector del vino: medalla de oro en el Concours Mondial de Bruxelles 2017.
PVP recomendado: 15,5 euros
Barcolobo Lacrimae Rerum
La uva para realizar este vino de tempranillo 100% procede de viñedos de 25 años de edad, ubicados en la Reserva Natural «Riberas de Castronuño – Vega del Duero». Se vendimia de forma manual en cajas de 15 kg con selección en viñedo y en bodega. La uva es despalillada no estrujada y se efectúa el sangrado directo a barrica para su fermentación. Cuenta con una crianza de tres meses en barrica francesa de 225 litros.
Nota de cata: color fresa acida, limpio y brillante. Fruta fresca muy intensa, armónico con toques de almendra. Boca fresca y sabrosa, con largo retrogusto.
Barcolobo La Rinconada Barrica
Se elabora con uva tempranillo de viñedos ubicados junto al Río Duero, caracterizados por suelos arenosos y pedregosos y clima continental. Se realiza con sus levaduras autóctonas y fermenta en depósitos de acero inoxidable de 10.000 y 5.000 litros con temperatura controlada durante 15 días. Tiene crianza en barrica de roble francés.
Nota de cata: color rojo cereza intenso con tonos violáceos, limpio y luminoso. Aromas a fruta fresca, en perfecta armonía con la madera. En boca es frutal, fresco, agradable y ágil.
Barcolobo Verdejo
Hecho con verdejo 100% de viñedos de 25 años de edad, ubicados en la D.O. Rueda. Se fermenta en barricas de roble francés, con crianza en las mismas.
Nota de cata: De color amarillo verdoso con aromas a fruta madura (mango, piña y pera) y fondos de madera. En boca resulta fresco, elegante y equilibrado, con buena acidez, de final largo e intenso.