El país más grande de América conocido por el frío y sus arces, también produce excelentes vinos de calidad. Aquí se pueden encontrar cuatro regiones vinícolas de interés y todo lo que desarrollan y ofrecen.
Aunque el país sea más conocido por su vino helado, también vale la pena descubrir los vinos espumosos canadienses. Razón por la que muchos han optado por el procedimiento eTA para ingresar a Canadá y sin pensarlo mucho con maleta en mano, se atreven a ver de cerca y experimentar los vinos de alta gama que el país tiene para ofrecer a todos y cada uno de sus visitantes.
A continuación cuatro de las mejores regiones en donde el visitante es recibido con los brazos abiertos para comenzar esta experiencia de viaje.
Valle de Okanagan: vinos de alta intensidad aromática
Una de las regiones vinícolas de Canadá es este mágico valle que solía ser un enorme glaciar, lo que en la actualidad genera algo bastante especial en éstas tierras. Los arenosos suelos con arcilla blanca sobre la arena de grava glacial con piedra caliza, granito y diferentes gravas de origen volcánico antiguo. Ubicado en medio de Columbia-Británica, se conoce como el centro del cultivo de frutas para el oeste canadiense.
Los vinos producidos en estos suelos naturalmente tienen una alta intensidad aromática, taninos más sutiles y mineralidad. Las uvas desarrollan dulzura rápidamente durante el día aunque sea todo lo contrario y frío por la noche, un ejemplo clásico de cambio diurno lo cual genera que los vinos de Okanagan tengan un poco de acidez bucal. Mezclas de merlot, riesling, pinot gris, chardonnay y variedad en vinos locales espumosos, es parte de lo que esta región ofrece a escala mundial.
Nueva Escocia: una provincia del atlántico con muchas áreas vinícolas en crecimiento
Esta provincia del atlántico tiene muchas áreas vinícolas en crecimiento. Ubicada en el extremo este del país, la Asociación de Productores de Uva se estableció en el año 1982. Aunque hoy en día aquí hay menos superficie de cultivo, Nueva Escocia actualmente cuenta con 24 productores de uva con casi 400 acres. El clima de esta provincia varía de una región a otra y las uvas crecen mejor donde hay un microclima favorable. Durante los buenos días de la provincia (de junio a septiembre), la temperatura puede llegar a rondar los 23 grados centígrados, lo que permite cultivar una mayor variedad de vides en comparación con regiones más frías como la isla del Cabo Bretón.
Para los que buscan una experiencia netamente inmersiva, realizar una cata en el sendero Good Cheer Trail sería una opción infalible. Un paseo por Avondale Sky Winery, donde invitan a experimentar su santuario, las suaves laderas del sur y las ondulantes colinas alimentan hectáreas de viñedos frente a un paisaje de mareas siempre cambiante.
Así es posible aprender cómo cosechan cada uva a mano y disfrutar de las salas de cata de vinos más tranquilas y encantadoras del mundo.
Península del Niágara: diez zonas de cultivo de vid
La creencia común en Niágara es que cuatro uvas dominan la región: pinot noir, chardonnay, riesling y cabernet franc. Dichas uvas maduran esencialmente en todas las cosechas y pueden normalmente ofrecer una buena botella de vino en un amplio espectro de estilos y precios de un extremo a otro de la península. Las temperaturas mensuales en Niágara son similares a las de Burdeos y Borgoña en Francia. Los efectos moderadores de los lagos Ontario y Erie, y la influencia protectora de la escarpa del Niágara, crean una zona de temperaturas moderadas durante las estaciones de crecimiento de primavera y verano.
Sus suelos ricos y fértiles y su microclima único son idóneos para el cultivo de la Vitis vinifera, lo que convierte a Niágara en una región vitícola de primer orden. Niágara cuenta con 13.600 acres de viñedo. La zona de cultivo de la uva se extiende desde el Niagara-on-the-Lake en el este hasta Grimsby en el oeste.
Como resultado de décadas de experiencia en el cultivo de la uva y de una amplia investigación, se han identificado diez zonas de cultivo únicas dentro de la península del Niágara, subzonas que incluyen áreas en las llanuras cercanas al lago Ontario y los bancos de la escarpa del Niágara.
Sólo los vinos elaborados con el 100% de las uvas cultivadas en una sub-denominación pueden hacer la correspondiente declaración de origen de la etiqueta. Además de las sub denominaciones, se han creado dos regiones para regular el uso de nombres ampliamente reconocidos: Niagara-on-the-Lake y Niágara Escarpment.
Niagara-on-the-Lake puede aparecer en la etiqueta de un vino procedente de la zona de cultivo al este de St. Catharines y Niagara Escarpment puede utilizarse en vinos procedentes de la zona de bancos al oeste de St. Catharines. Para utilizar estas denominaciones regionales, al menos 85% de la uva utilizada debe proceder de la zona mencionada, y el resto debe cultivarse en la península del Niágara.
Isla de Vancouver y las Islas del Golfo: viñedos y gastronomía
Una pintoresca línea costera y varios pueblecitos dan la bienvenida a otra de las regiones vinícolas de Canadá, la zona sureste de Vancouver, donde los viñedos han promovido un movimiento culinario en la región. Aquí es posible degustar vinos de diversos tipos de uva como pinot noir y diversos vinos espumosos que se producen en bodegas en la península Saanich en el valle de Cowichan.
En la Isla de Vancouver, la viticultura comenzó realmente después de que un ensayo financiado por el gobierno provincial – El proyecto Duncan – identificara la pinot gris, la auxerrois y la ortega como variedades prometedoras para este entorno costero único.
La Isla de Vancouver alberga una comunidad de viticultores y bodegueros familiares, sus alrededores cuentan con valles verdes, densas montañas boscosas y paisajes oceánicos. “La Isla” también ofrece algunos festivales gastronómicos excepcionales y experiencias culinarias para acompañar a sus visitas a las bodegas.
Varias zonas tienen condiciones climáticas locales propicias para la viticultura. Las bodegas del valle de Cowichan suelen estar protegidas de las tormentas del océano Pacífico por las montañas cercanas, y tienen una larga temporada de cultivo con bajo riesgo de heladas.
Antes de viajar a las regiones vinícolas de Canadá conviene asegurarse de cumplir con todos los requisitos para obtener la eTA Canadá lo que permite visitar estos lugares, conocer de cerca la naturaleza en donde ocurre todo el proceso y llevarse la mejor de las experiencias con los vinos norteamericanos. ¡Salud!