Cepas de la Culebra, una nueva bodega localizada en Riofrío de Aliste (Zamora) tiene en marcha una campaña de crowdfunding en la que se ofrece una edición exclusiva de su vino a la que tendrán acceso sólo los que apoyen la campaña ya que no se distribuirá.

Cepas de la Culebra es una nueva bodega que se encuentra en la localidad de Riofrío de Aliste (Zamora) que ha organizado una campaña de crowdfunding para sacar adelante su proyecto. Quienes realicen una aportación recibirán su vino de edición exclusiva que solo se enviará a aquellos que participen ya que indican que no se distribuirá. Además del vino, la bodega ofrece también a los mecenas la posibilidad de seguir el proceso de creación de su vino a través de redes sociales, desde la vendimia hasta el embotellado.

La campaña de crowdfunding y las aportaciones

Las aportaciones para esta campaña de crowdfunding de Cepas de la Culebra varían, desde 20 euros hasta 120 que es la de más coste, aunque hay cantidades intermedias para elegir en función de cada bolsillo. Cada aportación tiene su recompensa que depende del dinero aportado, así la cantidad más baja recibirá dos botellas de edición especial crowdfunding 2015, una botella vintage 2013 y una tarjeta de arte de Larisa Hancu y la más alta doce botellas edición especial crowdfunding 2015, seis botellas vintage 2013 y una tarjeta de Arte Larisa Hancu.
Hasta el momento de publicar esta noticia desde Cepas de la Culebra indican que «el objetivo del 40% está logrado, de hecho estamos ahora mismo en torno al 45% debido a varias aportaciones que se han hecho fuera de la página de crowdfunding». Su intención: «vamos a por el 50%, que hay aún mucho camino por recorrer y cada vez menos días». Todavía es posible participar hasta el 7 de noviembre.
Para este proyecto de crowdfunding la bodega ofrece un vino joven procedente «de los excelentes racimos» que explican que tienen este año. Consideran que ha sido un año bueno para la viticultura en la zona, ya que no ha habido heladas tardías de primavera ni tampoco granizo o lluvia tardía, por lo que las bayas están muy sanas en su punto de maduración óptimo. Este año, al haber tenido unas temperaturas veraniegas mas elevadas de lo normal, la vendimia se ha adelantado unos 15 días lo que ha influido en el buen devenir de la cosecha, aclaran.
El proceso de producción del vino joven será parecido al proceso de producción tradicional de vinos que existen por la zona, quedando abierta la posibilidad de ofrecer una crianza en barrica si el nuevo vino lo requiere.
El proyecto Cepas de la Culebra pretende, además, aportar su granito de arena a la economía local y dejar una puerta abierta para que más proyectos de este tipo se desarrollen.

Los vinos de Cepas de la Culebra

Los vinos son elaborados exclusivamente con las uvas que Cepas de la Culebra recoge de su viñedo familiar, que fue plantado en su mayor parte en 1945 y se compone de las variedades Mencía (la mayoría), Palomino y Tempranillo.
Cepas de la Culebra cultiva el viñedo siguiendo una viticultura sostenible, en la que prima el laboreo de la tierra y reduciendo los tratamientos al mínimo imprescindible. Y recalcan que continúan siguiendo «la sabiduría popular de la zona en la que cuidadosamente se observa que los ciclos lunares coincidan con la labor ejercida en la viña para que esta sea lo más beneficiosa posible para la planta (como ejemplo, la poda se realiza en la luna menguante de enero o febrero)».
Cepas de la Culebra también pretende que sus vinos reflejen el carácter de la tierra donde han crecido y por ello no usan en la etapa de vinificación ningún aditivo para la elaboración, salvo sulfitos.
La fermentación se realiza en depósitos de 500 litros y, al ser espontánea, normalmente dura entre 3 y 4 semanas. Tras la fermentación alcohólica y maloláctica, se efectúa una crianza en roble francés y americano que, dependiendo de la añada, se sitúa entre los 9 y 12 meses.
Toda la información del proyecto de crowdfunding de Cepas de la Culebra se puede seguir en este enlace: http://vkm.is/cepasculebra