Clos Ancestral, elaborado con la variedad forcada, forma parte del proyecto de Familia Torres de recuperación de este tipo de variedades. Este vino destaca por su acidez y complejidad aromática gracias a un pequeño porcentaje de la variedad autóctona xarel·lo y se ha elaborado con la mínima intervención para respetar el carácter de cada variedad.
Familia Torres lanza al mercado su nuevo vino blanco ecológico, Clos Ancestral, el quinto exponente de su proyecto de recuperación de variedades ancestrales que inició hace 40 años. Este nuevo vino está elaborado principalmente con la variedad ancestral forcada, amparado bajo la DO Penedès, y se convierte en el segundo vino de esta variedad que existe en el mercado.
Forcada es una variedad blanca ancestral, una de las más de cincuenta recuperadas por Familia Torres, que por ahora reúne las aptitudes para elaborar grandes vinos y hacer frente al cambio climático, ya que se trata de una variedad de ciclo largo, que madura lentamente y mantiene una marcada acidez. Además, cuenta con un pequeño porcentaje de la variedad autóctona xarel·lo, que contribuye a la complejidad aromática del vino con notas herbáceas y refuerza su identidad territorial.
Cada variedad se ha vendimiado y vinificado por separado, con la mínima intervención para respetar el carácter más genuino de cada una de ellas. Tanto la fermentación como la crianza sobre lías durante tres meses se han realizado en acero inoxidable. El vino resultante es perfumado y fresco, en el que destaca la fruta sobre un fondo de hierbas aromáticas. En boca se muestra directo, vivo, con una agradable textura fruto del trabajo sobre lías.
Viñedo y añada 2022
Clos Ancestral blanco 2022 procede principalmente de la finca Mas Palau, un viñedo de suelos arcilloso-calcáreos profundos de color rojizo, situado a más de 500 metros de altura, en el Alt Penedès, lejos de la influencia marítima. La forcada madura aquí entre finales de septiembre y principios de octubre, siendo habitualmente la última blanca en ser cosechada.
La añada 2022 en el Penedès se ha caracterizado por la falta de lluvia y algunos golpes de calor durante el verano, y por la excelente calidad sanitaria de la uva.
La forcada, una variedad muy interesante
Sobre la variedad forcada, Miguel Torres Maczassek, quinta generación de Familia Torres, declara que “es una variedad que nos ayuda a recuperar nuestra herencia vitivinícola y es muy interesante desde el punto de vista enológico, sobre todo porque mantiene una excelente acidez incluso en añadas cálidas”. Y añade que “esta es la única variedad blanca que estamos plantando en el Penedès porque nos permitirá continuar elaborando grandes vinos en un contexto de cambio climático”.
De esta forma, Clos Ancestral blanco se convierte en el nuevo exponente del proyecto de recuperación de variedades prefiloxéricas, que inició a principios de los años ochenta Miguel A. Torres con motivaciones filantrópicas, para contribuir a recuperar el patrimonio vitícola de Cataluña de antes de la filoxera.
En los últimos años, la quinta generación, con Miguel y Mireia Torres, ha dado un impulso al proyecto para identificar, no solo las variedades con gran potencial enológico sino aquellas que mejor se adaptan al cambio climático, y cristalizarlas en vinos que puedan llegar al mercado.
Pero no es todo. Además de los dos vinos Clos Ancestral, Familia Torres también elabora con variedades ancestrales recuperadas Grans Muralles (DO Conca de Barberà), un cupaje de querol, garró y otras variedades autóctonas, y dos monovarietales experimentales de producción limitada Forcada (DO Penedès) y Pirene, procedente del Prepirineo.
El precio de la botella es de 16,75 euros y se puede adquirir haciendo clic aquí.
