El concepto de conseguir una buena decoración y mejorar el espacio de almacenaje vale tanto para el hogar como para las empresas. Así con estos contenedores esquineros de botellas que se alargan horizontal y verticalmente y pueden dar cabida a gran cantidad de botellas se consigue un diseño vistoso, sin olvidar la funcionalidad añadida que se obtiene al aprovechar el espacio a lo largo y ancho.

Una solución del almacenaje que sin duda se adapta a cualquier bodega. El sistema se basa en que los esquineros empalman unos contenedores estándar con otros dando continuidad y protagonismo a las botellas. Los esquineros son cóncavos y convexos, algo que permite realizar pasillos por los cuales desplazarse independientemente de lo que haya detrás de ellos.

La empresa riojana Ebrosame que las fabrica afirma que aportan un valor añadido a la sala de crianza de las bodegas convirtiéndola en un lugar atractivo para las visitas. Se pueden utilizar para tapar columnas o para transformar espacios anodinos y mejorarlos para transformarlos en zonas más llamativas.