Con temas actuales y de interés sobre elaboración, comercialización, consumo de vino y agricultura regenerativa, la Asociación de la Industria Auxiliar del Vino de La Rioja ha celebrado la segunda edición del foro “Fortaleciendo la cadena de valor del vino”. El evento ha reunido a expertos, bodegas y profesionales de la actividad vitivinícola.
Esta II edición de “Fortaleciendo la cadena de valor del vino” ha dado un salto importante en relación con la primera edición, que se desarrolló el pasado 2 de junio de 2023. El foro lo organiza la Industria Auxiliar del Vino de La Rioja y participaron más de 200 bodegas e industrias auxiliares.
El sector del vino está experimentando una profunda transformación ligada a factores diversos, cambios en las preferencias de los consumidores, importantes avances tecnológicos, el cambio climático, innovación en envases, o regulaciones y políticas gubernamentales de gran impacto. Todo ello se ha tratado en este evento, desde diferentes perspectivas que queda resumido a continuación.
Empresas, expertos y profesionales de la cadena de valor del vino han debatido acerca de las tendencias en el mundo del vino, en un foro que ha fomentado el intercambio de conocimiento, la colaboración y la innovación, y que ha hecho propuestas para favorecer la adaptación a las demandas cambiantes de los consumidores a nivel mundial.
Los resultados de la discusión pueden servir para dar forma a estrategias y acciones para una industria vitivinícola más sostenible, más innovadora y más competitiva.
La presidenta de la Asociación de la Industria Auxiliar del Vino, integrada en la Federación de Empresas de La Rioja (FER), Elena Ceca, inauguró el II Foro acompañada por el director general de Grupo Rioja, Íñigo Torres y la consejera de Economía, Innovación, Empresa y Trabajo Autónomo del Gobierno de La Rioja, Belinda León. Y la secretaria general de la Asociación y de las Asociaciones Agroalimentarias de la FER, Sheila Argáiz fue la conductora del II Foro, que se completó con reuniones bilaterales entre los actores de la industria auxiliar del vino y bodegas y con visitas a las empresas.
Tendencias de consumo y transformaciones del sector, la visión de Pedro Ballesteros
En la primera jornada, el día 30 de mayo, que tuvo lugar tras la inauguración, la conferencia magistral de Pedro Ballesteros, Master of Wine, quien puso el foco en las transformaciones del sector vinícola a nivel mundial y las tendencias de consumo.
Sobre los mercados aportó varias ideas, valoró que no parece que la situación internacional sea esperanzadora. Por poner ejemplos: el cierre de Rusia por la guerra, «un mercado muy interesante que tardará en abrirse», China, el gran mercado emergente, que ha desaparecido, considera que su gobierno «tiene interés en crear su propia industria» y no tiene esperanza en que se recupere. Sobre Estados Unidos, un gran mercado, pero surgen los higienistas, esto es, las tendencias saludables, está en crisis. En cuanto a India «aranceles muy altos». Habla de mercados interesantes para el vino en África, pero son pequeños, no son la panacea.
En cuanto a España analizó que «siendo un país de bodegas nos faltan marcas. Somos un país con dependencia de la exportación y a valor bajo, para exportar hay que estar en los mercados grandes». Otras ideas que dejó «nos da vergüenza ir como país, se va por separado».
Pedro Ballesteros MW: “Estamos en una crisis más, vamos a salir de ella. Debemos creer en nuestras propias fuerzas. Lo importante son las personas que hacen el vino y las que lo beben y la creación de valor”.
En la unión de vino y gastronomía otras perlas: «tenemos chefs estrella Michelin, unas gastronomía alucinante… Todo el mundo viene a aprender aquí». Sin embargo sobre los restaurantes y hoteles españoles en el exterior señala que «no hay apenas en sus cartas vino español. Es horrible el trato que se da al vino español».
A pesar de un panorama quizás desalentador recalcó que «lo positivo sois vosotros. En el sector en el apartado de la exportación actualmente la gente está muy preparada. También somos el primer país del mundo en I+D vitivinícola, esto es la gasolina del vino».
Con un buen mensaje cerró su ponencia Pedro Ballesteros MW: “Estamos en una crisis más, vamos a salir de ella. Debemos creer en nuestras propias fuerzas. Lo importante son las personas que hacen el vino y las que lo beben y la creación de valor”.
Comercialización y crear valor, por María Laura Ortiz Chiavetta
Con el punto de mira en la comercialización de vinos en el mundo, la experta en vinos y consultora María Laura Ortiz Chiavetta se centró en crear valor en el vino y la importancia de construir una marca.
En lo que a crear valor se refiere habló de hacerlo a través de certificaciones de calidad como pertenecer a una DO y también certificaciones ecológicas, tiene claro que las certificaciones son necesarias.
María Laura Ortiz Chiavetta ofreció ideas para el trabajo con sumilleres, de hecho ha trabajado mucho en relación con la sumillería, como vicepresidenta de la Asociación Argentina de Sommeliers y coordinadora general del Concurso Mejor Sommelier del Mundo de la ASI, además de haber sido miembro del Comité de Relaciones Públicas y Mkt de la Association de la Sommellerie Internationale – ASI. En este sentido su recomendación fue que los sumilleres memorizan historias mejor que marcas.
En cuanto a dirigirse al segmento del lujo, señala que corresponde «hablar en el mismo lenguaje que la gente del lujo», que busca «calidad, exclusividad tradición y busca sentirse especial, con experiencias».
Como aspectos a comunicar y diferenciarse en el caso de Rioja mencionó las variedades nativas; el viñedo singular, lo considera como el Made in France en el caso de los productos de lujo franceses o otro ejemplo, la alta costura italiana, es exclusivo; las viñas viejas, que son únicas, que cuidaron padres y abuelos, quienes lo beban beben historia y algo único, y hay que saber transmitirlo. Sobre el tema de los vinos blancos se centró en su aumento de consumo en el mundo y opina que esta tendencia va a continuar.
Francesc Font ofreció las claves de la agricultura regenerativa y su aplicación en viñedos
La agricultura regenerativa fue abordada por Francesc Font, de la escuela online de esta temática The Regen Academy y vicepresidente de la Asociación de Viticultura Regenerativa. De familia de agricultores explicó su primer contacto con este tema fue a través de una charla donde le preguntaron cómo estaban sus suelos y él respondió sobre su composición, pero no su estado. Aquí se inició su cambio de mentalidad, no sin pasar por varios problemas e incluso desplazarse a Australia con su familia para aprender in situ sobre este asunto.
Font menciona seis acciones en viñedos para mejorar la fertilidad del suelo:
- Sustituir fertilizantes químicos por orgánicos (aportamos nutrientes y microorganismos, los microbios alimentan a las plantas)
- Dejar de labrar, es duro, ha de hacerse poco a poco. Se pierde fertilidad del suelo. Hemos exprimido tanto el sistema que se ha estropeado el suelo. Cuando el suelo está desnudo, se erosiona se compacta. Cuantas más plantas mejor suelo. La mitad de lo que captan, carbono lo inyectan al suelo, alimenta la microbiología para que la alimente a ella. Moulching, protege suelo, de lluvia, calor, guarda humedad, por lo que ayuda a gestionar el agua.
- Leguminosas: dan mucha vida al suelo.
- Descompactar.
- Biodiversidad a toda costa: no concebimos viñas sin cubiertas para nada. Son importantes los márgenes florales para no tener problemas de insectos o plagas.
- Dejar la química: producir en ecológico.
Francesc Font no quiere romantizar la agricultura regenerativa y señala que al aplicarla se paga un peaje, pues de inicio se reduce la producción.
Innovaciones en torno al reto de la sostenibilidad y reducción de la huella de carbono de las bodegas
La primera mesa redonda trató sobre innovaciones en la industria auxiliar del vino ligadas al reto de la sostenibilidad y reducción de la huella de carbono de las bodegas, en la que participaron Miguel de Valenzuela, delegado comercial de Bondalti Water AEMA; Rodrigo Bermejo; director gerente de Gon-Cruz; David Blanco, directivo de Inoxidables Alimentarias; Sergio Mamolar, director técnico de Intranox; Roberto Riaño, director comercial de la División Vinícola de Marzola y Alfonso Álvarez, socio de QE2 Ingeniería.
Valenzuela de Bondalti Water AEMA, firma que ofrece soluciones y servicios dentro del Ciclo Integral del Agua recalcó la importancia del sector bodegas en su negocio. En lo que a sostenibilidad se refirió a su carácter pionero en España «en la utilización de membranas de ultra filtración para instalaciones de depuración, por lo que la calidad de agua de vertido es de la mejor calidad, de forma que se puede reutilizar el agua en determinados procesos». También ofrecen instalaciones anaerobias.
Por su parte David Blanco de Inoxidables Alimentarias, que fabrica depósitos, explicó una de sus innovaciones que incide en el proceso de refrigeración del vino. Al colocar un sistema de refrigeración en el diafragma de dentro del depósito, el diafragma aprovecha el carbónico de la propia fermentación y además está refrigerando. Lo han patentando y destacó que logran buen control de la temperatura.
Rodrigo Bermejo de la comercializadora de productos enológicos Gon-Cruz; destacó las acciones de la empresa que por supuesto se trasladan al cliente final, aspectos como la eficiencia energética, iluminación led, diseño climático de sus instalaciones. como aprovechar la luz solar, y realizar la separación de residuos. Otras mejoras han sido una optimización de rutas y cambio de medios de transporte. En cuanto a embalaje y logística se decantan por envases reciclables en la medida de lo posible. Y sobre la oferta para la elaboración de vino hizo hincapié en su oferta de la filtración con celulosa, históricamente se ha hecho con tierras diatomeas, algo que mencionó como menos sostenible. Con la filtración de celulosas, un producto que viene de la madera apunta que por tanto es mejor para reducir CO2, puesto que la madera ya captura CO2 de la atmósfera. La celulosa es biodegradable y compostable.
Desde la firma centenaria Marzola con maquinaria agrícola desde vendimia hasta prensado, Roberto Riaño se centró en dos líneas en prensado. Por un lado la clásica prensa vertical destinada a mostos de calidad, que tiene un poco el trabajo hecho, no presenta minutos de desgaste, su expectativa está en 20-30 años, es de bajo mantenimiento y consumo energético, la transformación de energía eléctrica en energía hidráulica es de un aprovechamiento de prácticamente el 100%, casi no tiene consumibles. Sobre su huella de carbono, básicamente sería en la instalación y apenas lo que tiene que ver con el desplazamiento de los mantenimientos, «incluso a través de telemantenimiento se puede reducir al mínimo la preventiva y la correctiva de la máquina», destacó. La otra línea, «las prensas neumáticas y las prensas de agotamiento continuo progresivo que exigen y demandan mucho más consumo eléctrico, sí generan elementos de desgaste, aquí para reducir y optimizar estos consumos, se pueden usar tipos de prensado, uso de PLCs y de aprovechamiento de una programación de todos los ciclos de prensado, se incorporan elementos de hibernación, de paradas automáticas, de no consumo en standby, para que no tengan tanto impacto en la actividad».
Por su parte Alfonso Álvarez, de QE2 Ingeniería explicó que ayudan a las bodegas a enfrentarse a los retos que tienen «y lo hacemos a través de la digitalización. Les ayudamos a centrarse en lo importante, en el desarrollo de valor, mejorar la marca. El aspecto más importante sería la reducción de los costes. Y se controlan los consumos energéticos. Ayudamos a automatizar todos estos procesos de forma sencilla. Así se mejora la parte técnica y la de costes». Y otro reto importante en el que se enfocó es en el caso de las tiradas cortas de vino, donde cada vez más entra en juego la digitalización de los procesos. «Se pueden conocer los puntos clave del proceso para que esas tiradas cortas o especiales sigan siendo sostenibles y rentables para las empresas», matizó.
«Los conceptos de sostenibilidad y huella de carbono ya no son una moda» comenzó afirmando Sergio Mamolar, director técnico de Intranox, «son imperativos para la viabilidad y el futuro de nuestras bodegas». Sobre Intranox habló de que está especializada en soluciones de almacenamiento y depósitos inoxidables y que apuesta por la digitalización la sostenibilidad, la economía circular y que hace ya más de una década desarrolló el sistema Oresteo. Se trata de un sistema patentado de gestión de todos los procesos de vinificación, pero en esta jornada al centrarse en sostenibilidad, puso el foco en el Oresteo CO2.
«Este es un sistema por el cual recuperamos el CO2 procedente de la fermentación alcohólica, que está considerado como un residuo para reintegrarlo en los procesos de vinificación. Esto, en la actualidad genera muchas ventajas como pueden ser ahorros energéticos, ya que tenemos tecnologías más eficientes. Ello hace que también se tengan beneficios económicos ya que se consume menos energía, asimismo hay economía circular, ya que se usa el CO2 como motor en los diferentes procesos de vinificación y debido a ello, ayudamos también a las bodegas a cumplir la regulaciones actuales y de reducción de huella de carbono y sostenibilidad». Por tanto, afirmó que «hoy en día podemos decir qué Oresteo es la herramienta adecuada para aquellas bodegas que quieran implementar políticas de reducción de huella de carbono y sostenibilidad».
Tendencias en trazabilidad y digitalización
La segunda mesa redonda que involucraba de nuevo a la industria auxiliar del vino abordó las innovaciones que propone el sector auxiliar del vino para apoyar a las bodegas en lo relacionado con la trazabilidad y el reto de la digitalización. Contó con la intervención de José Sáenz de Santamaría Pombo, director general de Rivercap; Elena Ceca, CEO & 4ª generación de Tonelería Murua; Ana Otero, directora de Dolmar Tentamus; Diego Pascual, director corporativo de Innovación de Ramondin, Javier Gurría, cofundador de JIG y Carlos Tarragona , CEO de SpectralGeo.
En cuanto al apartado de cápsulas, José Sáenz de Santamaría de Rivercap explicó que «la digitalización la tenemos completamente incorporada tanto en la parte externa con los elementos que los diseñadores mandan. Puede incluir elementos puramente de información que puede venir por dos lados, una visual con tintas o con logos o un QR donde se transmite lo que la bodega desea, pero luego hay una opción mucho más sofisticada que se utiliza mucho en todo el mundo y poco en España, que es la información inteligente«. En cuanto a la información inteligente «puede ser a través del uso de pigmentos, tienen una relación entre el proveedor, el fabricante de la cápsula, y la bodega evidentemente confidencial. En ese aspecto contamos con tres opciones, dos soluciones comerciales y un desarrollo propio para evitar el uso de herramientas de terceros». Afirmó que «hay una gran infrautilización de los elementos visuales de las cápsulas, sobre todo en España».
En lo que se refiere a barricas, Elena Ceca, CEO & 4ª generación de Tonelería Murua y presidenta de la Asociación de la Industria Auxiliar del Vino, puso en valor que llevan «más de 125 años a haciendo barricas. La barrica es un elemento fundamental para el vino como sabéis, pero además de ser un elemento tradicional que aporte calidad necesitamos que esa barrica esté acorde a los tiempos que estamos viviendo hoy y el poco tiempo de que dispone el enólogo, que tiene una gran carga burocrática que hacer». En este sentido expuso el trabajo realizado en Murua: «hemos generado unas etiquetas que no van ni dentro, ni fuera, sino que van entre las duelas, de manera que el enólogo puede leerlo con una simple PDA. A nosotros también nos sirve para llevar una trazabilidad desde el bosque hasta la barrica. Y en el caso del enólogo puede ir añadiendo datos a esa barrica e ir enriqueciendo esa base de datos». Recalcó que se trata de un proyecto innovador que puede ser el inicio de un camino que permita «resolver problemas y que seamos mucho más eficientes en nuestro trabajo con la digitalización».
Después Ana Otero, directora de Dolmar Tentamus, destacó que «ahora mismo somos el laboratorio enológico más grande de España. Desde Gimileo trabajamos para las islas Canarias Galicia, Cataluña, Aragón… toda España». En el plano de la digitalización con la cantidad de datos que se manejan en un laboratorio mencionó que hay aspectos implantados y otros que añadirán. «Nuestro gran proyecto es que, como tenemos muchos parámetros de informes como unos 300.000 al año y los equipos con los que se miden los parámetros analíticos nos dan una respuesta y luego eso lo estamos intentando integrar al sistema de gestión de muestras que genera los informes que van a los clientes». Mencionó que «otra mejora de cara al cliente es que estamos incorporando imágenes de todas las botellas a todos los informes de exportación por lo que es una forma de trazar mucho mejor el informe también». Indicó que desde el laboratorio dan respuestas a las bodegas por ejemplo si hay un nuevo contaminante que se incluye en la legislación, si se pide algún componente que se necesita para algún país que así lo requiera… Siempre intentan «dar respuesta a cualquier tema que se pueda analizar o se requiera en el sector del vino».
Diego Pascual, director corporativo de Innovación de Ramondin, señaló qué han hecho en su firma para ver cómo pueden mejorar la sostenibilidad: «Hace cuatro años empezamos a digitalizar todo nuestro proceso productivo desde nuestra línea de la laminación de estaño y lo hemos ido ampliando. Y dentro de un programa de innovación abierta, hemos sido capaces de identificar las variables de todo nuestro proceso productivo, evaluar lo que más consume, dónde teníamos pérdida de eficiencia o qué nos hacía aumentar la huella de carbono. Hemos trabajado todas esas variables identificadas como críticas con el objetivo de mejorar nuestra huella de carbono y eficiencia«.
Seguidamente Javier Gurría, cofundador de JIG explicó que en su firma aportan digitalización, «a la bodega le preguntamos cuál es su problema. Por un lado nos enfrentamos también al Diógenes digital, porque se guardan muchos datos, pero no sabemos para qué guardamos esos datos. Lo que hacemos es mejorar los procesos, y que ese dato que sí que nos sirve para algo lo utilicemos en el proceso y en la mejora de la propia actividad«.
Carlos Tarragona, CEO de SpectralGeo destacó que son especialistas en agricultura de precisión, «llevamos varios años con el cambio climático, sucesos de altas temperaturas, precipitaciones escasas… Lo que hace Spectralgeo es crear modelos basados en inteligencia artificial que nos permiten conocer o poder predecir en qué se van a concretar todos estos cambios«. Esto se ha materializado en una aplicación inteligente de agricultura: «A través de 47 proyectos de investigación que llevamos hasta ahora hemos creado Agrai que es una herramienta que nos permite dos funcionalidades principales. Por un lado, monitorizar las parcelas, es decir conocer semana a semana cuáles son las parcelas más problemáticas y poder caracterizarlas. Y por otro lado, predecir variables agronómicas clave como pueden ser la calidad, predecir la producción o la afección que van a tener de determinadas enfermedades. En conclusión, lo que nos permite Agrai y las tecnologías que utilizamos de inteligencia artificial de múltiples fuentes es incrementar la rentabilidad de las parcelas y mejorar la eficiencia».
Cata de vinos
El broche final al foro de la Industria Auxiliar del Vino de La Rioja lo puso Pedro Ballesteros MW nuevamente con una cata donde se contó con tres vinos de tres bodegas que operan en Rioja y que tienen proyectos bodegueros fuera de nuestro país.
- Valdemar Estates, un syrah de Wala Wala, EEUU que elabora la familia Martínez Bujanda en su bodega Valdemar.
- Jack London´ Cabernet Sauvignon, un tinto de Kenwood Vineyards (California; Estados Unidos) que forma parte del grupo Pernod Ricard.
- Vigno, de Torres, que proviene del Valle del Maule en Chile. Precisamente se ha puesto en marcha «Vigno», una iniciativa privada para poner en realce los vinos que tengan 60% uva carignan y una guarda mínima de 24 meses, con uvas de viñedos de más de 30 años plantados en condición de secano en el valle del Maule.
La Asociación de la Industria Auxiliar del Vino
La Asociación de la Industria Auxiliar del Vino, integrada en la Federación de Empresas de La Rioja (FER), nace con el reto de convertirse en un referente empresarial con identidad propia e impulsar un sello de calidad Rioja que asegure la competitividad de las empresas.
Esta organización empresarial de la industria auxiliar del vino, cuenta con 29 empresas asociadas, que emplean a 1.170 trabajadores y tienen un volumen de negocio en torno a los 215 millones de euros.
Más información sobre esta la Asociación de la Industria Auxiliar del Vino de La Rioja en su web.