Las bodegas, que realizan una actividad importante en España con vinos valorados y exportados por todo el mundo, tienen un aliado en nuestro país: el sol. El autoconsumo energético en las bodegas puede aportar muchas ventajas a este modelo de negocio más allá del ahorro, que no es poco.
No hay duda de que el producto vinícola español es de los más valorados en el mundo. Más de 975.000 hectáreas de viñedos producen al año casi 40 hectolitros de vino, que se exporta a multitud de países. Pero, además, España cuenta con una ventaja diferencial: sus horas de sol. De modo que plantearse el autoconsumo energético en las bodegas es una gran opción para mejorar y comprometerse con la sostenibilidad.
Eso hace que se abra una posibilidad muy interesante alrededor del autoconsumo fotovoltaico para los productores. El sector bodeguero puede verse muy beneficiado de acceder a esta energía renovable y alternativa, y más aún si se cuenta con profesionales como Solarfam para el diseño de todo el proyecto. Hoy explicaremos algunas virtudes de este modelo energético.
Ventajas del autoconsumo en industrias bodegueras
Si se plantea establecer este sistema en una bodega, los primero a hacer es contactar con una empresa que pueda guiar y asesorar durante todo el camino. Así, se podrá estar siempre al tanto de las subvenciones para placas solares y otras ayudas para el sector.
Además, hay que tener muy claro que la amortización de este tipo de instalaciones es bastante corta. Los paneles solares tienen una vida útil por encima de los 25 años y, a pesar de la fuerte inversión inicial, el ahorro será superior a este gasto en unos 5 años.
Reducción de costes de energía
En España, una bodega de tamaño medio tiene un consumo anual de unos 350.000 KW/h; una cifra puede ser mucho mayor cuando hablamos de grandes productores. La suma total de la industria, según el Ministerio de Medio Ambiente, es de 400 millones de KW/h al año, por lo que cada empresa gastaría entre 20.000€ y 80.000€ en energía anualmente.
El uso de la energía solar y de los paneles fotovoltaicos es una excelente solución para reducir este consumo. Los datos afirman que, según el tamaño de la bodega y de la planta solar, se puede lograr un ahorro de entre el 10% y el 40%.
Autonomía energética
Otro factor importante a la hora de decantarse por el autoconsumo energético es no estar obligado a depender de las empresas eléctricas. Los estudios más recientes aseguran que se puede conseguir más del 20% de autonomía energética, pudiendo alcanzar una cuota completa del 100%.
Esto puede ser importante porque, tal como demostró un trabajo en la Universidad de Granada, los consumos de energía son muy variados a lo largo del año en una bodega. Se les obliga a contratar una potencia global demasiado alta para los meses de menos consumo.
Sostenibilidad
El trabajo de la tierra implica, además, el profundo conocimiento de que debe respetarse el medio ambiente para seguir viviendo produciendo en el futuro. Las emisiones de CO2 pueden reducirse entre un 20% y un 35% si se cuenta con un proyecto de autoconsumo apoyado por una asesoría energética.
Compensación por la energía sobrante
Terminamos este repaso indicando una ventaja que también puede dar un pequeño impulso a nuestra bodega. Según la cantidad de módulos fotovoltaicos instalados, se podrá aprovechar un porcentaje de manera inmediata y otro tanto dedicarlo a la red pública (con su correspondiente compensación económica). El margen suele ser del 65% para consumo propio y el 35% para abastecimiento público.