Con el objetivo de aumentar el abanico de posibilidades a la hora de producir sus vinos y seguir apostando por prácticas respetuosas con el medio ambiente, Familia Fernández Rivera ha adquirido una nueva parcela sostenible de 28 hectáreas de viñedo en Gumiel de Mercado, Burgos. Así pasa a tener un total de más de 450 hectáreas en propiedad.

Para Familia Fernández Rivera, grupo familiar con más de 50 años de trayectoria, la verdadera riqueza está en la calidad del suelo en el que crecen sus uvas. Con una localización inmejorable, ha adquirido esta nueva finca situada a 920 metros de altitud sobre el nivel del mar, por lo que las temperaturas durante el verano son ligeramente más suaves y frescas que en otras zonas.

Tecnovino Familia Fernández Rivera

En el nuevo terreno predomina la uva tempranillo, la variedad característica y mayoritaria de las cuatro bodegas de Familia Fernández Rivera, una pequeña representación de merlot (2% de la superficie) y un banco de germoplasma con diferentes variedades y clones procedentes de diversos rincones de la Ribera del Duero.

Por otro lado, la nueva finca del grupo cuenta con certificación ecológica y en ella conviven refugios para insectos, aves y pequeños mamíferos, ayudando a la conservación de la biodiversidad.

Con más de cinco décadas de historia y tres generaciones de pasión y respeto por el vino y la tierra, esta nueva finca llega a Familia Fernández Rivera «como una apuesta de la marca por ampliar su legado y como un reflejo de la evolución constante a la hora de ofrecer al mundo unos vinos de máxima calidad», recalcan.

Así, con la uva procedente de la finca de Gumiel de Mercado, Familia Fernández Rivera explica que «garantiza una continuidad en la calidad y en la identidad de unos vinos que son apreciados por su personalidad, elegancia y potencial de envejecimiento» y con los que la marca remarca que ha ganado «renombre nacional e internacional».