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Foto: Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV).

En un contexto como el actual la respuesta de los hogares españoles en cuanto a consumo de vino se refiere no se ha visto afectada, en realidad el consumo de vino durante el año pasado subió un 0,5% en volumen hasta alcanzar los 429,8 millones de litros, sin embargo la facturación sí ha disminuido, un 2,5%, con una cifra de 1.021,7 millones de euros. Este último dato se explica por la bajada del 3% del precio medio, que ha situado en 2,38 euros el precio del litro, significando una caída del  precio de los vinos con denominación de origen (tranquilos y espumosos) y un incremento del consumo de los vinos tranquilos sin DOP, que son más económicos. Por lo tanto si bien el consumo de vino no ha disminuido en España, los españoles buscan un ahorro a la hora de elegir el vino que compran para sus casas.
Estos datos se desprenden del panel de consumo alimentario que realiza el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) para el canal alimentación y que ha analizado el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), en este informe se menciona que la mejora del consumo de vino durante 2012 en los hogares españoles se produce a pesar de que diciembre fuera un mes negativo, con pérdida de volumen que empeora la caída del gasto.
Desglosado por productos, en 2012 los únicos productos que crecen en volumen, un 3,6% hasta los 234,2 millones de litros, son los vinos tranquilos sin denominación de origen, que constituyen el 54,5% del volumen total de vino consumido en alimentación. Pero es que además la subida en valor de este tipo de vinos supone el 7,2%, hasta los 272,7 millones de euros, con un incremento del 3,5% en el precio medio, que se situó en los 1,16 euros por litro. El dato a destacar es que los precios de estos vinos más económicos son los que tienen una mayor subida, en concreto hasta el 15% en el mes de diciembre, que puede deberse al aumento de costes experimentado en la pasada vendimia.
En cuanto a los vinos tranquilos con denominación de origen, son los que llevan la voz cantante en las ventas en valor con el 47% de la facturación total, pero con una caída del ‐6,9% hasta los 482,8 millones de euros en 2012. La bajada en volumen ha sido del ‐3,5%, 135,7 millones de litros. Además se ha cerrado el año de forma negativa para el consumo de cava, puesto que como se ha mencionado el mal mes de diciembre ha afectado a este espumoso, llegando a provocar un descenso del 3% en volumen consumido durante el año, con 27 millones de litros y un gasto del 7,8% hasta los 133,9 millones de euros, de forma que el precio medio ha caído un 5%.
La buena noticia es para el consumo de sangrías y tintos de verano ya que 2012 ha sido una vez más un buen año para estos productos. En volumen han subido un 8,8% y  en valor un 14,9%, llegando a los 58,5 millones de litros y los 44 millones de euros respectivamente. Con 75 céntimos de euros por litro de precio medio, un 5,6% más elevado que en 2011. En cuanto al consumo en alimentación de “otros vinos” (que incluye a los vinos de aguja con D.O.P., vinos de licor con D.O.P., otros vinos y espumosos sin D.O.P.) se ha visto que las pérdidas en volumen llegan al 0,7%, hasta los 32,8 millones de litros, aunque hubo una subida del 2,7% en el precio medio, así se eleva el gasto para estos productos un 2%, hasta los 132,3 millones de euros.
Por último, el informe del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV) basado en los datos del panel de consumo alimentario del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), indica que durante la presentación de los datos de consumo alimentario correspondientes a 2012, por parte del Ministro Arias Cañete, anunció la nueva disponibilidad de los datos de consumo extradoméstico. Según estos datos dentro del consumo de bebidas en este canal, sólo aumenta el consumo de agua de grifo (3,2%) y el de vino (+0,8%), mientras que disminuye la demanda del resto de bebidas. A pesar de las dificultades por las que atraviesa el consumo en general y el del canal de la restauración en particular, este no es un mal dato para el vino español, ya que como apuntan desde el OEMV «está sabiendo hacer frente a la crisis gracias a una amplia cartera de tipos de vino y a un gran esfuerzo también en exportación».