Los españoles hicieron un gasto en vino y bebidas con vino en su casa por un valor de 521 millones de euros, frente a los 498 millones destinados a la cerveza, durante el primer semestre de 2018; pese a que las cifras de volumen en litros de cerveza duplican a las de consumo de vino. Estos datos ponen de manifiesto que en la batalla del valor el vino sigue ganando con creces a la cerveza.
El gasto en vino de los hogares españoles sigue por delante de la cerveza y otras bebidas espirituosas, tal y como se registraba el pasado año. Durante el primer semestre de 2018, según las comparativa recogida por el panel de alimentación del MAPA para consumo en hogares (sin incluir el canal horeca y ventas directas u otras), el consumo en vinos y bebidas con vino representa el 44,5% de los euros invertidos por los hogares españoles en consumo de bebidas alcohólicas, frente al 40,4% de las cervezas. Es decir, los españoles consumieron vino y bebidas con vino en casa por un valor de 521 millones de euros, un 6,5% más, frente a los 498 millones destinados a la cerveza, que creció un 2,5%. Todos son datos que el Observatorio Español del Mercado del Vino incluye en su informe «Consumo de vino en los hogares españoles | Primer semestre 2018«.
Por contra, en términos de volumen y dadas las diferencias de precios medios, la cerveza es el 63,3% de las bebidas con alcohol, frente a un 33,1% del vino. Así, en litros, el volumen de las ventas de cervezas en los hogares españoles es muy superior al de vinos, rozando los 400 millones de litros las primeras por poco más de 200 millones los segundos.
El consumo de vino por tipos
Por tipo de vino, son los vinos tranquilos con DOP los que marcan la trayectoria: suben un 7,4% en valor hasta los 274 millones de euros y un ligerísimo 0,4% en volumen hasta los 66,7 millones de litros en seis meses, con encarecimiento de su precio en un 7% hasta los 4,11 €/l. Sin embargo los espumosos con DOP y cavas muestran mucha peor evolución, cuya fuerte caída en volumen (- 12%) no permite tampoco facturar más (-3,9%) pese a aumentar sensiblemente su precio medio un 9,5% hasta los 4,81€/l.
Por su parte, los vinos tranquilos sin denominación de origen ni IGP crecen también en valor pero caen en volumen. En este caso, el aumento de facturación es algo inferior al de los vinos con DOP (6,9% frente al 7,4%), y su caída en volumen (-5%) mucho peor dato que el ligero crecimiento de aquellos. Son estos vinos sin indicación de calidad los que mayor encarecimiento sufren (+12,6%) hasta alcanzar 1,43 €/l.
Se mantiene un sorprendente crecimiento de los vinos con indicación geográfica protegida (IGP) o “vinos de la tierra”, que vienen registrando cifras de crecimiento superiores al 40% en los últimos 12 meses y de casi el 30% en valor, que incluso resultan mayores en los meses más recientes.
Tan abultado crecimiento puede deberse al cambio de indicación con el que se comercialice una determinada marca de gran rotación. Se mantienen también en los últimos meses de forma constante, pero con sentido inverso, la pérdida de ventas en los vinos de aguja. Sin embargo, evolucionan muy positivamente según estos datos las ventas de vinos de licor o generosos, con crecimiento del 12,8% en valor y del 15,7% en volumen, acompañados de ligera caída en sus precios medios, que sitúan sus ventas durante el semestre en 15,7 millones de litros por valor de casi 20 millones de euros.
El consumo de vino: estable en volumen pero más caro, el precio medio del vino subió cerca del 10% en el primer semestre
Según indica el informe consumo de vino en los hogares españoles, presentado por el OeMv; ambas categorías se han ido aproximando en facturación durante los últimos años, si bien el vino mantiene su liderato pese a que la cerveza duplica al de vino en términos de volumen. El consumo de vino se mantuvo estable en este primer semestre pese a que el precio medio subió cerca del 10%. Los vinos con DOP lideran el valor de las ventas, creciendo a buen ritmo, si bien destaca el excepcional aumento de los vinos con IGP.
En valor, aunque las categorías se van aproximando en tiempos recientes, la imagen es muy diferente. El vino siempre ha facturado más que la cerveza en los hogares españoles, y así continúa siendo, aunque cada vez con menor diferencia.
Como conclusión, las cifras indican que en volumen la cerveza ha ganado al vino la batalla del consumo pero todavía no la del valor. Muchas ventas, muy buena distribución, a precios que se mantienen muy ajustados y sin gran evolución, mientras el vino se vende menos en nuestros hogares pero sigue facturando más y, pese a sus vaivenes, consigue una mejor evolución de sus precios medios.