El proyecto europeo GrapeBreed4IPM tiene como objetivo reducir el uso de plaguicidas en la viticultura y preservar la biodiversidad. Con un enfoque multiactor y de codiseño, aspira a desarrollar variedades de vid resistentes y difundir buenas prácticas para una viticultura más sostenible en Europa. El proyecto cuenta con 21 socios y asociados de Francia, Alemania, Italia, España, Austria, Suiza y Serbia y cuenta con un presupuesto de 5.000.000 de euros recibidos de la Comisión Europea en el marco del programa de financiación Horizon Europe.
La reunión inaugural del proyecto europeo GrapeBreed4IPM “Desarrollo de soluciones sostenibles para la viticultura mediante la innovación multiactor orientada a la mejora genética para la gestión integrada de plagas” tuvo lugar recientemente en la Universidad Haute-Alsace, en Colmar (Francia). Con la vista puesta en fomentar la biodiversidad se apuesta por reducir los plaguicidas en viticultura.
La viticultura es crucial en la agricultura de la Unión Europea, pero ahora enfrenta el desafío de mejorar su sostenibilidad y proteger la biodiversidad. Según el Foro Económico Mundial y la Estrategia de Biodiversidad de la Unión Europea para 2030, la pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas representan desafíos cruciales para la humanidad en la próxima década. Un factor determinante en esta problemática es el uso masivo de plaguicidas químicos en la agricultura, una práctica que compromete gravemente la biodiversidad y la salud de los ecosistemas.
Viñedo y plaguicidas
Dentro de este contexto, la viticultura destaca como uno de los sectores más dependientes de los plaguicidas químicos, consumiendo aproximadamente el 60% de los fungicidas aplicados en la UE. Esta situación demanda una acción urgente para reducir el uso de productos fitosanitarios químicos en la viticultura, sin embargo, se debe equilibrar con la importancia económica y cultural que la vid y sus productos tienen en la UE. El vino y los productos vitivinícolas se sitúan entre los tres principales sectores agroalimentarios de exportación de la Unión Europea, lo que subraya la relevancia estratégica de este cultivo.
Los recientes avances y las nuevas perspectivas de la viticultura han abierto la posibilidad de que GrapeBreed4IPM aborde la reducción de fungicidas y preserve la biodiversidad. Las lecciones aprendidas de la experiencia previa en viticultura han demostrado que el éxito en la mejora de la sostenibilidad depende de la implicación global de todos los actores. Por este motivo, los principales grupos de investigación europeos en viticultura han unido sus fuerzas y participan en este proyecto con un enfoque multiactor y de codiseño para obtener los mejores conocimientos y lograr el máximo impacto.
La clave del proyecto reside en el desarrollo de variedades de vid resistentes a enfermedades importantes, adaptadas a las condiciones medioambientales, edafológicas y climáticas locales, diseñadas con el objetivo de reducir la dependencia de los pesticidas químicos. Sin embargo, el éxito de estas nuevas variedades también depende de su aceptación por parte de los consumidores, ya que son relativamente desconocidas en comparación con las variedades tradicionales.
Además, GrapeBreed4IPM proporcionará a agricultores, viticultores y asesores las mejores prácticas y directrices para la gestión integrada de plagas, con el objetivo de fomentar una viticultura más respetuosa con el medio ambiente y sostenible en Europa.
Los 5 objetivos del proyecto GrapeBreed4IPM
En cuanto a los objetivos planteados son los siguientes:
- Co-diseñar una visión común de los actores de la cadena de valor y sincronizar las regiones.
- Esfuerzo de investigación para comprender mejor las bases moleculares de la susceptibilidad y la resistencia a los patógenos de la vid y las interacciones de la vid con el medio ambiente.
- Cruce participativo de variedades nuevas y diversas resistentes a las enfermedades.
- Esfuerzo de investigación para la obtención de variedades emblemáticas resistentes a las enfermedades sin modificar las características de los vinos.
- Diseño y difusión de herramientas y directrices de buenas prácticas.
Un proyecto con 18 socios internacionales y dos socios asociados
El proyecto ha comenzado este mes de abril y tendrá una duración de 4 años, finalizando en marzo de 2028. Para su ejecución, GrapeBreed4IPM cuenta con un presupuesto de 5.000.000€ recibidos de la Unión Europea en el marco del programa de financiación Horizonte Europa (subvención número 101132223), más 600.000€ recibidos del gobierno suizo para un socio de este país.
El Instituto Nacional de Investigación Agronómica, Alimentaria y Medioambiental (INRAE) lidera el proyecto en colaboración con 18 socios internacionales y 2 socios asociados: Julius Kühn-Institut – Centro Federal Alemán de Investigación de Plantas Cultivadas; Istituto di Genomica Applicata; Fundación Edmund Mach; Instituto Francés de la Viña y el Vino; Ministerio de Alimentación, Medio Rural y Protección del Consumidor de Baden-Württemberg; INRAE Transfert; Universidad de Empresa y Sociedad de Ludwigshafen; Viveros Cooperativos Rauscedo; Horta; Ministerio de Economía, Transportes, Agricultura y Viticultura; Plataforma Tecnológica del Vino; Comité Nacional Interprofesional de Vinos con Denominación de Origen e Indicación Geográfica; Neiker, Tecnalia; Mercier, pépiniériste viticole; Asociación de Productores Alemanes de Plantas de Vid e.V.; Grupo de trabajo para la promoción de variedades de uva resistentes a los hongos; Moët Hennessy; Instituto de Primeneútica de Polopriverdi; el Instituto de Investigación de Agricultura Ecológica y Viñedos Foncalieu.
Komlan Avia, investigador del INRAE, es el coordinador de GrapeBreed4IPM.