¿Cuánto gasta un enoturista en España? ¿Más o menos que el turista generalista? ¿Cómo viaja? ¿En pareja , en familia, en solitario…? El Informe sobre la Demanda Turística en las Rutas del Vino de España que ha realizado la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin) precisamente va en busca del perfil del enoturista. Los datos son muy interesantes para conocer sus características e intereses y saber qué ofrecerles.
La Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin) ha hecho público un nuevo Informe sobre la Demanda del Turismo del Vino, realizado a través del Observatorio Turístico de las Rutas del Vino de España, la herramienta de análisis de más utilidad existente actualmente para conocer la evolución del enoturismo español. Como en ocasiones anteriores, el estudio recoge conclusiones referidas a las motivaciones del viaje; la organización del mismo; los destinos elegidos; el origen, edad y perfil profesional y sociodemográfico del visitante; el nivel de satisfacción o el gasto medio entre otros indicadores. Los resultados son similares en muchos aspectos a los obtenidos en los informes anteriores, aunque se observan algunas diferencias. Además, hay que destacar que se ha llevado a cabo utilizando una nueva metodología de encuestación online, promocionada a través de la campaña permanente #ILoveEnoturismo. Esta campaña está activa durante todo el año y da la posibilidad de optar a interesantes premios a los enoturistas que viajan a alguna de las 25 Rutas del Vino de España.
Este Informe sobre Demanda Enoturística de la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin) es el sexto de la serie en la que se presentan los principales datos relativos al turista del vino en nuestro país (con respecto al último trimestre de 2015), aunque en esta ocasión se ha seguido una metodología diferente. Así, mientras que las entregas anteriores los estudios se realizaron mediante oleadas de encuestas localizadas en algunas rutas del vino en momentos puntuales, esta vez se han llevado a cabo en un periodo continuo (octubre, noviembre y diciembre de 2015) y de manera online, cursando los datos que los propios enoturistas han ido suministrando al aceptar la invitación desde los establecimientos integrantes de las rutas del club de producto.
De esta manera, la información analizada corresponde a una muestra de 363 encuestas válidas (de un total de 458 recibidas) facilitadas por los enoturistas tras visitar una de las Rutas del Vino de España y acceder a participar en la campaña #ILoveEnoturismo puesta en marcha con este fin. Gracias a este nuevo método de encuestación se ha podido ampliar el ámbito territorial de la muestra y se ha reducido la estacionalidad de la misma, considerándose los datos mucho más representativos.
El viaje: estancia media de dos días y gasto superior al turista de tipo genérico
Según el nuevo informe de Acevin-Rutas del Vino de España, la estancia media en las rutas del vino es de 2,07 días, lo que sigue constatando que el enoturismo es un producto asociado a fines de semana y puentes. La cifra es prácticamente igual a la arrojada por el anterior (2,10 días). También se mantiene un equilibrio en la proporción entre los viajeros encuestados que pernoctan (49,3%) y los que no pernoctan (50,70%), resaltando el carácter de proximidad de esta modalidad turística. Los alojamientos hoteleros de calidad media–alta y media, los alojamientos rurales y los apartamentos son los favoritos de los enoturistas y, aunque el uso de este tipo de establecimientos ha subido con respecto a los datos anteriores, el porcentaje de alojados en establecimientos hoteleros se ha reducido del 61,6% al 54,2%, habiendo ganado peso el alojamiento en casa de familiares y conocidos.
Es destacable por tanto que el enoturista busca calidad y confort a un precio asequible descartando los más altos y bajos de la gama hotelera, al tiempo que utiliza en mayor medida la casa de amigos y familiares y le otorga cada vez más peso a alojamientos rurales y apartamentos turísticos.
Otra diferencia destacable respecto al informe anterior se encuentra en el método de organización del viaje, donde se ha producido un incremento de las reservas con paquete turístico. Internet, el teléfono y el email son los canales preferentes de reserva utilizados.
En cuanto al gasto económico del enoturista, vuelve a constatarse que sobrepasa el nivel de la media del turista nacional o internacional. El gasto medio total diario del enoturista asciende a 133,98 euros, por lo que si consideramos los 2,07 días de media de duración del viaje, el gasto medio total en un viaje de enoturismo sería de 277,34 euros por persona, una cifra bastante superior a la registrada en las encuestas precedentes.
De este gasto de 133,98 euros el mayor corresponde al capítulo de alojamiento (34,1 €/día), seguido de la restauración (33,2€/día) y la compra de vino (29,10 €/día). En visitas a bodegas, el gasto diario del enoturista asciende a 15,7 €, en visitas a museos 5,90 € y en regalos 14,7 €.
El enoturista viaja en pareja, en grupos reducidos y en familia
Las conclusiones del nuevo informe resaltan que el enoturismo sigue siendo una modalidad turística de escapada que habitualmente se realiza en pareja (43%) o grupos reducidos de amigos (31,4%), aunque los viajes en familia empiezan a cobrar cierto peso (19%, un 14,9% viajes de familias con hijos y un 4,7% de viajes de familias sin hijos). Asimismo, un 5% viaja en grupos organizados y un 1,1% realiza el viaje solo.
También se constata que la demanda es predominantemente española y que el perfil sociodemográfico del visitante mantiene un equilibrio entre hombres (47,6%) y mujeres (52,4 %), con una franja de edad mayoritaria que se sitúa entre los 36 y 45 años, correspondiente a personas en activo pero sin tratarte exclusivamente de un público con alto poder adquisitivo.
El conocimiento sobre el mundo del vino, más aficionados que entendidos
No suelen ser grandes entendidos en vino: un 52,1% se considera aficionado, un 23,4% principiante y un 17,5% apasionado o entusiasta. Las cifras del nuevo informe indican que ha subido el porcentaje de los aficionados y los entusiastas mientras que han descendido los que se consideran principiantes, por lo que se puede afirmar que el enoturismo atrae al público interesado en el mundo del vino.
Los motivos para viajar a una ruta del vino: sus vinos, bodegas y gastronomía
Los principales factores de atracción a una ruta del vino son sus vinos, sus bodegas y su gastronomía. El 38,5% de los encuestados realiza el viaje motivado directamente por la cultura del vino, y el 37,9% afirman haberlo elegido como parte de sus vacaciones, lo que da cuenta de la importancia del enoturismo como elemento de ocio y disfrute. Visitar bodegas, degustar vinos y disfrutar de la gastronomía autóctona son las actividades más realizadas, aunque existe un crecimiento en la demanda de actividades en la naturaleza y de índole cultural. El coche propio y el autobús siguen siendo los medios de transporte más utilizados en los desplazamientos por las Rutas del Vino.
Los principales factores que han determinado que el enoturista conozca la ruta del vino son la recomendación de amigos y familiares (54,7%), sus vinos (42,3%) e Internet y las redes sociales (20,9%). Estos datos ponen de manifiesto la importante labor del “boca a oreja” que existe en el enoturismo (personas que disfrutan de la experiencia vivida en las rutas del vino y la comparten con familiares y amigos, jugando un papel prescriptor determinante). Asimismo, los vinos de cada zona vitivinícola y las importantes sinergias que se están dando entre los propios consejos reguladores de las denominaciones de origen y las rutas del vino, constituyen elementos de atracción hacia los destinos enoturísticos, contribuyendo de esta forma (vivencia y disfrute de los vinos en el territorio productor) a la promoción de los vinos. Estos aspectos se están reforzando cada vez en mayor medida en las distintas denominaciones de origen.
Por último, cabe destacar el importante papel que desempeña Internet y las redes sociales en la promoción del enoturismo, habiendo contribuido las mismas (en un 20,9% de los encuestados) a atraer a los turistas al territorio.
Las Rutas del Vino de España más conocidas y visitadas
Además del grado de conocimiento previo de la ruta del vino visitada, el 54,2% de los viajeros conocen otras Rutas del Vino de España. Ribera del Duero ha sido visitada por el 37,3%, Rioja Alta por el 34,7% y Rioja Alavesa por el 33,2% de las personas que voluntariamente cumplimentaron la encuesta. En otro nivel figuran las Rutas del Vino de Rueda (21,8%), Marco de Jerez y Rías Baixas (17,6%), Alicante y Jumilla (15,5%), Utiel Requena (15%), Somontano (14,5%), Navarra (14%) y El Bierzo (12,4%). El resto de rutas no alcanzan el 10%.
Entre las Rutas que las y los enoturistas desean visitar próximamente destacan Ribera del Duero (39,2%), Rías Baixas (33,2%), Rueda (30%), Navarra (29,5%), Rioja Alavesa y Rioja Alta (27,5% cada una). Las siguen El Bierzo (25,9%), Txakoli de Álava (23,3%), Somontano (22,8%) y Penedès (21,8%). En general cabe destacar el deseo que existe de disfrutar de todas las zonas vitivinícolas que conforman el Club de Producto Rutas del Vino de España.
Aunque el dato de que el 54,2% de los viajeros conocen otras Rutas del Vino de España puede considerarse como positivo, el informe indica que debe aspirarse a incrementarlo potenciando acciones de promoción y venta cruzada entre las distintas rutas del vino que integran el Club de Producto Rutas del Vino de España, así como la comunicación corporativa del propio club con todos sus integrantes o el desarrollo de acciones conjuntas entre distintas rutas del vino. El Club de Producto y la Marca Rutas del Vino de España no es conocido por un 66% de los enoturistas. Un 24% manifiestan tener una ligera idea de lo que representa, mientras que un 10% manifiestan conocerlo muy bien.
El informe apunta que «sin duda alguna, los grandes ajustes presupuestarios que se han producido en los últimos años, han reducido drásticamente los presupuestos del Club de Producto RVE, lo que se ha traducido en una reducción de las acciones de promoción de la marca Rutas del Vino de España. En este momento, se están rediseñando las acciones de promoción buscando el mayor impacto en el mercado nacional al menor coste y el desarrollo de acciones de promoción y apoyo a la comercialización a nivel internacional».
Los enoturistas, unos viajeros con un alto índice de satisfacción
Los resultados de este informe marcan un índice de satisfacción de 8,22 puntos sobre 10, destacando las visitas a bodegas, la hospitalidad y la atención al cliente, la estancia en los alojamientos y la gastronomía por encima de otros aspectos. Por ello, el enoturista se muestra proclive a recomendar las rutas del vino y a volver a hacer un viaje enoturístico, ya sea en el mismo destino o en otro diferente. Algunos de los aspectos calificados con menor puntuación en cuanto al índice de satisfacción son los referentes a la señalización y las infraestructuras relacionadas con carreteras y accesos.
El informe completo se puede consultar en la sección de publicaciones de la web de Rutas del Vino de España: www.wineroutesofspain.com
Infografía de este informe aquí >>