BASF ha presentado su nueva gama de productos para la protección de cultivos y semillas, con el objetivo de hacer frente a los desafíos del clima y plagas locales. Entre ellos los hay de cuidado y protección de viñedos. La compañía se enfoca en mejorar los rendimientos de los cultivos más importantes de cada región, ofreciendo soluciones innovadoras y desarrollando herramientas digitales para maximizar la cosecha y la calidad de los cultivos, al mismo tiempo que se reduce su impacto sobre el medio ambiente.
Basf cuenta con un ampllia gama de productos para la protección de cultivos y semillas, diseñados para ofrecer a los viticultores herramientas que les permitan hacer frente a los desafíos derivados de las plagas locales y los cambios de clima, y para cumplir con las demandas cambiantes de los consumidores.
La compañía, en línea con su estrategia en el sector de la agricultura presentada en 2019, se está centrando en mejorar los rendimientos de los cultivos más importantes de cada región, incluyendo la soja en las Américas, los frutales y hortalizas en Europa y el arroz en Asia-Pacífico. El valor de su cartera de innovaciones sigue siendo alto, con un pico de ventas potencial estimado en más de 7,5 mil millones de euros, especialmente gracias a productos que se lanzarán en los próximos 10 años.
En este contexto, Livio Tedeschi, presidente de la División de Soluciones Agrícolas de Basf, ha explicado que su objetivo es convertirse “cada vez más en un proveedor de soluciones agrícolas integradas y ampliar nuestra oferta para los agricultores. Por esta razón seguimos invirtiendo fuertemente en nuestra cartera de tecnologías agrícolas, destinando 944 millones de euros a I+D solo en 2022”. Y ha añadido que “los agricultores pueden confiar en que nosotros seguimos innovando y trayendo al mercado nuevas materias activas, nuevas formulaciones y variedades que les permitan extraer el máximo valor económico a sus cosechas, siendo más respetuosos con el medio ambiente”.
Por su parte, Peter Eckes, presidente del Departamento de I+D y Registro de la División de Soluciones Agrícolas de Basf, ha declarado que su cartera “demuestra cómo estamos aprovechando nuestro gran conocimiento en el campo de la química y de las ciencias ambientales, además de la biotecnología y la digitalización, para crear soluciones de nueva generación”. Y ha añadido que “la potente cartera de productos de BASF para el control de las malas hierbas es un muy buen ejemplo de cómo nuestro enfoque multidisciplinar proporciona soluciones que encuentran el equilibrio entre las necesidades de los agricultores, la sociedad y el medio ambiente”.
Soluciones innovadoras de BASF en Europa
Basf está a punto de lanzar soluciones innovadoras para el control de malas hierbas en Europa, lo que supone un gran avance para los agricultores de la región. Además, la compañía tiene como objetivo mejorar la calidad y el sabor de frutas y verduras, reduciendo el desperdicio de alimentos y desarrollando nuevas herramientas digitales.
Una de las novedades más destacadas es la introducción de Revyona® en frutales, hortícolas y arroz a partir de 2023, después de demostrar su eficacia en el control de enfermedades en cereales, soja y maíz. Esta nueva materia activa mantiene la eficacia excepcional y el perfil regulatorio favorable de Revysol, asegurando una cosecha de calidad y proporcionando un gran control de enfermedades como el mildiu, la sarna y otras típicas de los frutales, la viña y la patata. Revyona ya está disponible para los fruticultores y viticultores de España en la presente campaña 2023.
Otra de las innovaciones más importantes es la incorporación de Agrigenio Vite, una herramienta digital desarrollada por Horta, empresa italiana adquirida por Basf en 2022. Este Sistema para la Toma de Decisiones (DSS) permite a los viticultores tomar decisiones más acertadas en cuanto a las aplicaciones de fungicidas, maximizando la cosecha y la calidad de la misma, al mismo tiempo que se reduce su impacto sobre el medio ambiente.
La compañía está a punto de lanzar también su última materia activa, el insecticida AxalionTM. Pertenece a una nueva clase química con un nuevo modo de acción, identificado para poder proteger la cosecha de un amplio espectro de plagas de insectos mordedores y chupadores. Mientras consigue actuar sin dañar a insectos auxiliares y polinizadores, Axalion controla plagas que han ido desarrollando resistencias hacia los compuestos químicos existentes en el mercado. Los primeros lanzamientos de productos formulados en base a esta materia activa tendrán lugar en Asia en 2023, a los que seguirán Europa y América Latina.
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