Hongos y bacterias sirven para mejorar la salud y el medio ambiente, ese es el principio del que parte la startup madrileña Nostoc Biotech que ofrece productos de carácter ecológico con microorganismos vivos. Estos aportan nutrientes al cultivo y lo protegen frente a enfermedades y plagas, entre ellas la yesca de la vid, nemátodos, trips, etc. Actualmente la firma busca financiación para ampliar su capital a través de la Bolsa Social, la primera plataforma de crowdfunding de inversión autorizada por la CNMV.
Con el objetivo de reducir el abuso de pesticidas y fertilizantes químicos en la agricultura, reequilibrar los suelos y potenciar prácticas agrícolas eficientes y sostenibles, nace Nostoc Biotech, una empresa madrileña creada en 2014 dedicada a la fabricación y distribución de biofertilizantes: productos ecológicos que contienen microorganismos vivos con la capacidad natural de aportar nutrientes al cultivo y/o protegerlo frente a ciertas enfermedades y plagas.
La yesca de la vid, los nemátodos, la araña roja, la verticilosis del olivo, los trips y la tuta son algunos de los principales problemas que afectan al sector agrícola en España, explica esta firma. «En los últimos años, estas enfermedades y plagas se han combatido fundamentalmente a base de pesticidas químicos; sin embargo, estudios publicados en la revista científica Nature demuestran que los pesticidas provocan alteraciones en los ecosistemas y suponen un riesgo para la salud«. Y aclara que entre esos riesgos se encuentran «el de que los bebés de las embarazadas expuestas a estos productos nazcan con discapacidad mental y el aumento de posibilidades de padecer cáncer, párkinson o de sufrir un infarto».
Asimismo destaca que los fertilizantes químicos utilizados en la agricultura suponen hasta un 10% de la emisión global de gases de efecto invernadero y la agricultura es uno de los principales causantes del cambio climático. Según un informe de la FAO de 2014, los gases de efecto invernadero procedentes de la agricultura, la silvicultura y la pesca se han duplicado en los últimos 50 años.
Esta startup busca financiación a través del crowdfunding de inversión en la Bolsa Social, la primera plataforma de crowdfunding autorizada en España por la CNMV, que pone en contacto a inversores de impacto social con proyectos cuya misión es mejorar la sociedad o el medio ambiente, como es el caso de Nostoc Biotech que necesita una ampliación de capital de 200.000 a 250.000 euros para aumentar su capacidad de distribución y llegar a más clientes. En menos de un mes, ha conseguido un 38% de la inversión requerida y numerosos potenciales inversores están interesados en entrar en el capital de la compañía.
El mercado de los biofertilizantes es aún incipiente en España, pero según Enrique Cat, uno de los fundadores y CEO de Nostoc Biotech, “los microorganismos que habitan el suelo son responsables de muchas y muy complejas interacciones con la planta, como la captación de nutrientes, la protección frente a patógenos, o la producción de hormonas. Asimismo, los químicos aplicados en el terreno agrícola matan estos microorganismos empobreciendo la calidad de los suelos”.
Así, apostar por el uso de biofertilizantes contribuye a la mejora del medio ambiente ya que permite la recuperación del equilibrio natural de los suelos, así como eliminar graves enfermedades y plagas, con incluso mayor efectividad que los químicos.
Otro de los beneficios de los biofertilizantes «es la mejora en el sabor de las frutas y verduras, que coincide con el cambio de hábitos en los consumidores españoles que apuestan cada vez más por productos ecológicos», indican desde Nostoc Biotech. Además de cambios en el consumo, hay un cambio de mentalidad en los agricultores españoles, ya que son los propios agricultores tradicionales quienes demandan productos menos agresivos con el suelo. El 90% de la facturación de Nostoc Biotech proviene de agricultores convencionales, no de los ecológicos.
La financiación a través de la Bolsa Social
Para la publicación de los proyectos en la plataforma, no basta con el requisito de generar un impacto social o medioambiental acreditable, las empresas han de contar con un modelo de negocio probado y potencial de crecimiento. Nostoc Biotech explica que aspira facturar en los próximos cuatro años más de 4 millones de euros). Asimismo, tienen que superar el proceso de selección en el que participan Analistas Financieros Internacionales (AFI) y los expertos del equipo de la Bolsa Social.
Mediante la fórmula de equity crowdfunding, los inversores interesados en cada proyecto pueden financiarlos a golpe de clic, y convertirse en socios de los mismos. El fenómeno de la inversión de impacto tiene cada vez mayor calado en España porque como sentencia Jose Moncada, CEO y fundador de la Bolsa Social “se está produciendo un cambio de mentalidad, pues cada vez más gente incorpora criterios éticos no sólo en las decisiones de consumo, sino también a la hora de invertir sus ahorros”.
Por su parte, Enrique Cat afirma que opta por la Bolsa Social para la ampliación de capital de su empresa porque “la financiación participativa nos permite llegar a más gente. Cualquier inversor, por pequeño que sea, se convierte en embajador de la empresa permitiéndonos crear una red que de otra manera no tendríamos”.