Desde Italia llega el Centellino, un útil decantador y aireador de vino. Su función: oxigenar el vino al tiempo que lo sirve en la copa. De empleo sencillo y tamaños manejables basta con ponerlo en la botella y usarlo para decantar, airear y servir.
De creación italiana el Centellino sirve como decantador y aireador de vino. «Una nueva y exclusiva forma de decantar el vino por copa que mantiene y preserva las cualidades del vino», detalla la firma que lo fabrica, DNA Consulting. Con el Centellino explican: «ya no será necesario esperar para que el vino alcance toda su expresión y actúa como un dosificador perfecto». Este artículo lo distribuye en exclusiva en España Representaciones Beltrán.
Ideal tanto para profesionales como para usar en el ámbito doméstico, oxigena el vino al mismo tiempo que lo sirve.
Entre sus principales características:
- Una dosis de vino decantado proporciona la cantidad perfecta para la degustación.
- Decanta y libera delicadamente el bouquet (certificado).
- No causa traumas al vino, lo airea y lo oxida (certificado).
- Amplifica el sabor del vino (certificado).
- Mantiene la identidad del vino.
- Muestra las cantidades que se beben.
¿Cómo se usa este decantador y aireador de vino?
En la empresa que hacen el Centellino informan sobre su modo de empleo en tres sencillos pasos:
1. Inserción
- Descorchar la botella de vino.
- Sostener con cuidado el Centellino, por la madera del tapón más grande.
- Insertar presionando sobre el tapón de madera, no sobre el cristal.
- Una vez insertado, mantener sólo la botella para el resto de los pasos.
- Abrir el tubo del Centellino.
- Sostenga la botella para que el Centellino quede vertical y con el depósito debajo.
- Llene el depósito completamente para una porción perfecta
- Gire la botella más del 90° para verter el vino.
- El Centellino debe estar más alto que la botella.
Pero existe otra funcionalidad más de uso:
Preservar
- Deje el Centellino en la botella. Conservará el vino, inalterado, y estará listo para el siguiente vertido.
Y recomiendan que cuando haya terminado su uso, se retire el Centellino cogiendo la madera del tapón más grande y que nunca se retire sujetando el vidrio.
La historia tras el Centellino
La historia del centello, ciantello o Centellino se remonta a la antigüedad. El nombre latino era «cyatulus«, diminutivo de «cyatus», tomado del griego «kyathos» derivado del verbo «kyo» que significa «verter».
Más adelante, el Centellino tomó la forma de un cucharón y fue utilizado en las posadas medievales para servir la porción apropiada de vino, para el placer del viajero.
Con la llegada del vidrio y el almacenamiento del vino en frascos y botellas, los artesanos expertos diseñaron un Centellino utilizando técnicas de boca-soplado.
«Hoy en día, el Centellino enriquece las mesas derramando y oxidando la porción perfecta de vino, haciendo de esta manera la experiencia más noble y armoniosa», indican los creadores.
Como curiosidad la empresa dispone también del «Centolio», de uso similar pero en este caso para el aceite de oliva.
Formatos
El Centellino está disponible en diferentes tamaños: 125 ml, 100 ml, 60 ml y 35 ml. Y también en una caja por lo que resulta ideal para regalar.
Empresa: DNA Consulting
Web: www.centellino.it/ita/il-centellino
En España:
Representaciones Beltrán: www.representacionesbeltran.com
agente@nullrbeltran.com