Quince estados productores de vino, más de 35.000 hectáreas dedicadas al cultivo de la vid y una producción de 64 millones de litros fruto del trabajo de 400 bodegas, estas son algunas de las cifras del sector de vino en México. La historia del nacimiento de esta actividad y su estado hoy en día, nos lleva hasta la celebración de unos de los congresos más importantes y de relevancia internacional, el 43º Congreso Mundial de la Viña y el Vino.
Pinceladas de la historia del vino en México
La vid llegó a América en el segundo viaje de Colón en 1493 junto a la caña y el olivo.
En el caso concreto de México, la vid se desarrolló en dos etapas. La primera, por el centro del país en la ruta conocida como el Camino Real, de la Ciudad de México a Nuevo México y Texas, pasando por Puebla, Querétaro, Guanajuato, Aguascalientes, San Luis Potosí, Coahuila y Chihuahua. Y la segunda, a lo largo de Baja California.
Fray Junípero Serra, nombrado el padre de la viticultura Baja Californiana, hizo toda una revolución a finales del siglo XVIII creando lo que a la postre seria la zona con más hectáreas plantadas de vid en México para vino de calidad.
El vino mexicano en la actualidad
México cuenta con 15 estados productores de vino, de los cuales se destinan más de 35.000 hectáreas dedicadas al cultivo de la vid, produciendo así 64 millones de litros a través del trabajo de 400 bodegas.
La industria vitivinícola es la segunda fuente de empleo en el sector agrícola con más de 500 mil jornaleros.
El vino mexicano ha crecido a gran escala debido a la tecnología de vanguardia, conocimientos y asesoría avanzada de expertos internacionales.
En los últimos 10 años la viticultura mexicana ha atravesado una reingeniería muy importante tanto en la elaboración como en el viñedo. Las nuevas plantaciones del país llevan una línea más particular, adaptando los trabajos de campo como la poda (corte de la vid) y conducciones (formación de la planta de vid) a los varietales basados en los diferentes climas y suelos que existen en el país para mejorar la calidad de la uva y con ello, los vinos.
En el país hay dos climas marcados por la altura de la Sierra Madre Occidental. Uno establecido al oeste de ella con influencia del océano Pacifico con veranos calurosos e influencia de los vientos fríos de norte para crear un clima mediterráneo. Y otro basado en una mayor altura en el centro del país al este de la Sierra Madre Occidental, con alturas entre 1500 y 2000 metros sobre el nivel del mar, lo que hace que se dé un clima que propicie que los vinos tengan un equilibrio muy interesante.
Coahuila es la zona con mayor tradición vitícola en México con una historia de más de 420 años de elaboración ininterrumpida de vino.
Querétaro, Guanajuato y Aguascalientes son zonas de viticultura con una tradición centenaria, que con el tiempo y problemas económicos fueron desapareciendo, aunque hoy en día nuevos proyectos han dado una visión de modernidad a la viticultura, adaptándola a las condiciones de altura, lluvia y suelos.
Baja California está dividida en más de 10 valles vitícolas con climatologías y suelos diferentes; hay zonas frías como Ojos negros y zonas más cálidas como valle de Guadalupe, zonas con contenidos de Cloruro de sodio alto y zonas donde esta concentración baja considerablemente, así como zonas de suelos arenosos, arcillosos y graníticos dando vinos muy diferentes en concepto, aromas y gusto.
Las nuevas plantaciones en México se hacen con sistemas donde las plantas crecen sobre alambres a diferentes alturas (lo que se conoce como en espadera), un aspecto que facilita la cosecha manual o con máquina, haciendo que la insolación de los racimos y las hojas sea más uniforme.
La producción y vinos de Baja California
Baja California procede de un suelo salino de fondo marino, por lo que hay un rastro mineral en los vinos ensenadenses que puede ser potencializado por el tipo y/o sistema de riego que se utilice, por la zona y la profundidad del pozo y por la persistencia del riego.
Dentro de los 10 valles representativos de producción de uva en Ensenada, el de mayor relevancia es el Valle de Guadalupe.
El Valle se puede subdividir en tres zonas; comenzando desde la zona más profunda llamada el Valle de Calafia, alejada de los vientos frescos del mar con suelos arcillo-arenoso. Inmediatamente después, en la parte central del valle, encontramos otra zonificación llamada El Porvenir, con suelos arenosos-arcillosos y finalizando con San Antonio de las Minas, zona con ligera elevación, suelos más graníticos e influencia marítima.
Hay una concentración más alta de sal en los viñedos que se encuentren en la zona central del valle, a diferencia de los que se encuentran en la parte final o en las laderas limítrofes del mismo valle como son las elevaciones de Sierra Blanca y en las cuales el suelo tiene más componentes arcillosos que ayudan a la asimilación, retención de agua, e intercambio iónico y catiónico.
La adaptación de las plantas a los suelos de Ensenada es de estudio, ya que aunque en la teoría los niveles de salinidad que existen en el Valle de Guadalupe hacen que la viticultura sea difícil, los mexicanos han logrado que Ensenada sea reconocida mundialmente por la calidad de sus vinos.
En México se trabajan una gran cantidad de varietales o uvas de las más importantes del mundo debido a los climas tan variados que recorren su territorio.
La uva nebbiolo de Ensenada tiene un carácter frutal por su maduración intensa, es de buena acidez y gran carga de color, con un ligero toque salino proveniente de los suelos de la región, a diferencia del nebbiolo del centro de México con corte piamontés, elegante, con baja estructura de color, de buena acidez y elegantes notas aromáticas de bosque bajo, hojarasca, hongos, musgos y demás notas de sotobosque.
Un país que albergará el 43º Congreso Mundial de la Viña y el Vino
El Congreso Mundial de la Viña y el Vino se celebra anualmente en uno de los 48 países afiliados a la Organización de la Viña y el Vino (OIV) y esta es la segunda ocasión que se realiza este evento en México, la primera vez fue en 1980. El 43 Congreso Mundial de la Viña y el Vino en México será del 31 de octubre al 4 de noviembre en Ensenada (Baja California, México). Además del congreso tendrá lugar la asamblea general de la OIV y la Expo Uva & Vino Baja California.
La organización del congreso está en manos del Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV) y el Comité Provino de Baja California. EL CMV representa los intereses de la industria ante autoridades y organismos públicos y privados, defiende los intereses de sus asociados y busca promover la creación de estaciones enológicas y otros organismos técnicos y prácticos. Por su parte el Comité Provino de Baja California es una asociación con 80 vinícolas agremiadas y 32 años de experiencia en la promoción de la cultura del vino de Baja California a través de la producción de eventos, como las tradicionales Fiestas de la Vendimia, enotours especializados, un Club del Vino con entregas a todo México y otras iniciativas educativas que fortalecen vínculos con distintos sectores regionales y nacionales.
El evento tiene como objetivo reunir durante cinco días a los más grandes expertos del mundo vitivinícola para tratar y exponer temas relevantes con impacto para el sector.
Se espera la participación de más de 2500 personas, entre los cuales se encuentran académicos, científicos, agrónomos, ampeólogos, enólogos, viticultores, laboratoristas, sommeliers y expertos de todos los países productores de vino. Estarán representados más de 40 países productores, como Alemania, Argentina, Australia, Chile, España, Francia, Grecia, Italia, India, Nueva Zelanda, Portugal, Reino Unido, Suiza, Uruguay, entre otros.
En el congreso se han confirmado más de 320 papers (presentaciones) de trabajos de investigación en temas como viticultura, enología, economía, derecho, seguridad y salud.
Asimismo se realizarán visitas técnicas a las regiones vitivinícolas, a fin de que los participantes conozcan de primera mano las bodegas mexicanas y el trabajo que están realizando en materia de microclimas, prácticas agrícolas, enológicas y catas.
De forma paralela al congreso se llevará a cabo Expo Uva & Vino Baja California en el Baja Center ubicado en Rosarito. Se plantea como un espacio de generación de negocios donde se presentarán las novedades tecnológicas, innovaciones y tendencias de los procesos relacionados tanto con la producción de vino, el cultivo de uva pasa, uva de mesa y zumos. Cuenta con un espacio de 9,200 m2 de área de exposición para alojar los pabellones de todos los estados vitivinícolas del país, pabellones internacionales, proveedores de la industria, zona B2B, universidades, centros de investigación y aliados de la cadena productiva para la uva y el vino.
Enlace para saber más sobre el Congreso y registrarse.
Parte del artículo es un resumen con información de Jesús Díez (químico, enólogo y viticultor mexicano).