A pesar de las previsiones iniciales por la ola de calor vivida, se recogieron 15 millones de kilos más (un 23% más que lo previsto), gracias a la mejora de las condiciones climáticas en los días previos a la vendimia. Este hecho para la DOP Cariñena demuestra las excelentes condiciones de este terreno y el clima para el cultivo del viñedo, en un año agrícola especialmente complicado. El cierre de campaña de este año deja un 9% más que en 2021, unos 6,6 millones de kilos, con unos informes técnicos que destacan la buena sanidad de la uva.
La Denominación de Origen Protegida Cariñena ha recogido este año más de 80 millones de kilos de uva, un 9% más que en 2021, y un 23% más que las primeras previsiones de cosecha, minadas por las intensas olas de calor del verano que se estaban viviendo en España. Esta campaña cuenta además con datos técnicos que destacan que la sanidad de la uva ha sido Muy Buena durante toda la campaña.
En un año especialmente complicado para la agricultura de nuestro país, la DOP Cariñena ha valorado muy positivamente los resultados finales, con la vendimia ya completada en las 32 bodegas de la Denominación. Abril trajo lluvias que apuntaban a una buena cosecha, pero después la brotación se retrasó, aunque las temperaturas inusualmente altas ya en mayo aceleraron la fase de floración. Llegado el verano, las altísimas temperaturas hicieron pensar en una cosecha muy baja, pero la mejora en agosto y septiembre permitió la recuperación de los frutos.
Tanto el estado de la vegetación como la sanidad de la uva han sido muy buenos, no se han dado problemas de enfermedades ni plagas; ha habido ausencia de polilla del racimo, ya que la totalidad de parcelas aplica la técnica biológica de la confusión sexual. Son datos destacados de los informes técnicos de vendimia.
La Denominación subraya que «este resultado de 80 millones de kilos demuestra las excelentes condiciones del terreno y el clima para la vid. El calor favorece la concentración de los azúcares y los pigmentos que dan su color a las uvas, lo que anuncia vinos más aromáticos y redondos, con gran calidad de la cosecha«.
La vendimia comenzó tempranamente a mediados de agosto, con la variedad blanca chardonnay, y el grueso arrancó en los primeros días de septiembre, con las variedades más cultivadas, como la garnacha tinta, uva autóctona de Cariñena y que supone el 33,7% de la superficie de viñedo. Actualmente, la DOP ocupa 14.110 hectáreas, en 14 municipios. En los últimos años, se ha extendido el cultivo en espaldera, para permitir la vendimia mecanizada, que ya supone el 75% de las uvas cosechadas.
Los primeros Vinos de las Piedras de 2022, los blancos jóvenes, saldrán al mercado en breve. A comienzos de 2023 estarán disponibles la mayoría de los tintos jóvenes, mientras que comienza la maduración de los vinos de crianza y reserva de esta añada.
La exportación en 2021 llegó a 60 países
Dos de cada tres botellas irán al mercado exterior, como tienen previsto desde el apartado de comercialización. En 2021, se alcanzó la cifra récord de 60 países de los cinco continentes. En total se vendieron más de 35,2 millones de botellas, de las que el 63,6%, casi 22,4 millones, se exportaron.
Alemania fue el principal destino (24,26% de las ventas en el exterior), seguida de Reino Unido (15,56%) y Canadá (12,90%). Los Vinos de las Piedras tienen presencia en todo el mundo, con destinos de grandes mercados como Estados Unidos o China, países productores como Francia o Italia, y se extiende a naciones como Letonia, México, Brasil, Japón, Mongolia, Australia, Kenia, entre otros.