La UIOE (por sus siglas en francés) agrupa a los enólogos de 16 países de Europa, América y Asia, entre los que se encuentran los principales territorios vitivinícolas como Italia, Francia, España, Alemania o Portugal. Está considerada como la entidad de mayor relevancia y más representativa a nivel mundial en el sector de la enología. El jerezano Santiago Jordi ha sido nombrado presidente de la Unión Internacional de Enólogos durante su asamblea general.
Santiago Jordi, de 44 años, había ocupado en los últimos 6 años la vicepresidencia de la UIOE, cargo que simultaneó durante la última década con la presidencia de la Federación Española de Asociaciones de Enólogos, puesto que abandonó recientemente para centrarse en la presidencia internacional.
La Unión Internacional de Enólogos, con sede mundial en París, fue fundada en 1965 por las federaciones de Argentina, Chile, España, Francia, Italia y Portugal, a las que fueron sumándose otras federaciones por todo el mundo hasta alcanzar las 16 actuales.
Entre sus objetivos generales destacan la defensa y promoción de la profesión de enólogo; la reivindicación del enólogo titulado como responsable técnico de una bodega, evitando el intrusismo y la confusión con otros profesionales del mundo del vino; la unificación ante las distintas autoridades administrativas y reguladoras de los distintos procedimientos biológicos y de análisis químico, físico, microbiológico y sensorial propios de una bodega, y la armonización de la formación reglada para la obtención del título oficial de enólogo.
De este modo, Jordi se incorpora a la co-presidencia hasta ahora ocupada por el francés Serge Dubois y el italiano Riccardo Cotarella, encabezando una candidatura única de consenso que ha sido ratificada por unanimidad por el comité ejecutivo. Asimismo, en representación de la Federación Española de Enología se han incorporado también al comité directivo de la UIOE, el actual presidente de la FEE Luis Buitrón, y la tesorera Begoña Jovellar, con responsabilidades en las áreas de concursos y de relaciones estratégicas externas, respectivamente.
Para el enólogo jerezano “es un privilegio como profesional cualificado español representar a todos los enólogos del mundo, pero también una enorme responsabilidad en un momento en el que nuestra profesión está sometida a enormes desafíos que van desde la reivindicación de nuestra formación superior para frenar el intrusismo o la promoción de una labor de investigación continua del enólogo que se tendrá que enfrentar en los próximos años al reto del cambio climático y su impacto en el viñedo mundial”.
En cuanto a la gestión de la propia Unión, Santiago Jordi ha confirmado que algunos de sus objetivos serán modernizar la estructura de la institución, aumentar el número de países miembros y abrir la federación a todos los profesionales con cualificación académica reglada relacionada con la elaboración de vino, comprendiendo no sólo a los enólogos sino también a técnicos de grado medio, capataces enológicos o técnicos en viticultura. En esta línea, también ha adelantado que una de sus primeras tareas será confirmar en breve la celebración del próximo comité ejecutivo de la Unión Internacional en Galicia, en abril de 2022, haciéndolo coincidir con la celebración del Vinespaña, el concurso oficial de vinos de la Federación Española de Enología.