Con el objetivo de mejorar el grado de formación de los profesionales del sector de la agricultura regenerativa nace el consorcio Terra. La iniciativa tiene como objetivo mejorar los procesos de formación de personas relacionadas con el sector agrario mediante el sistema de microcredenciales.

La agricultura regenerativa se basa en un conjunto de prácticas que tratan de incrementar al máximo la sostenibilidad de la producción agrícola y ganadera, poniendo especial atención en la salud del suelo, la biodiversidad y la circularidad.

Tecnovino agricultura regenerativa

Estas prácticas despiertan cada día más curiosidad e interés por parte de los agricultores, que sin embargo adolecen de una falta de formación en estos aspectos.

Por esta razón, nace TerraCert, un proyecto que mediante el sistema de microcredenciales, mejorará la formación de los profesionales en agricultura regenerativa.

Microcredenciales para mejorar la formación

Las microcredenciales son como un minicertificado que muestra las habilidades y conocimientos adquiridos por una persona a lo largo de una breve experiencia de aprendizaje. Ya se utilizan en muchos campos y profesiones, y la Comisión Europea quiere que sean aún más comunes y reconocidos dentro del territorio de la UE.

Son formaciones de duración breve, sin las obligaciones y requisitos que establecen otro tipo de formaciones más reguladas, pero permiten mejorar los conocimientos y las capacitaciones profesionales.

TerraCert pretende aportar una formación basada en microcredenciales en aspectos de agricultura regenerativa, donde agricultores de toda la Unión Europea puedan acceder a una información útil para afrontar los retos e incertidumbres de la producción de alimentos.

El sector agrario se encuentra inmerso en un continuo proceso de mejora de la producción de alimentos. Uno de sus mayores retos es obtener una rentabilidad económica suficiente para asegurar la viabilidad de la explotación, mejorando además el uso sostenible de recursos naturales, y con unas condiciones que permitan el desarrollo de las zonas rurales de la UE.

El proyecto cuenta con financiación del programa europeo ERASMUS+ y acaba de comenzar a desarrollarse con la constitución de un consorcio de entidades de cinco países: España, Italia, Polonia, Grecia y Francia. Está liderado por el socio español Terra Viva Ibiza, y además en nuestro país cuenta con la participación de la Universidad de Baleares y de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA).