Una docena de botellas de vino fueron enviadas al espacio hace más un año junto a un centenar de fragmentos de cepas de las variedades merlot y cabernet sauvignon. Ya han regresado a la Tierra a bordo de la nave SpaceX Dragon tras permanecer este tiempo en la Estación Espacial Internacional (ISS) de la NASA. Puede parecer una locura pero forma parte del Sistema Micro(μ)-Biológico Complejo (CommuBioS) que estudia el envejecimiento de líquidos complejos multicomponentes durante su almacenamiento a largo plazo en el espacio. Tanto las botellas de vino como las cepas enviadas forman parte del primer programa privado de investigación espacial, Misión WISE.
Como explican desde el proyecto CommuBioS «almacenar muestras de vino, un líquido químicamente complejo», en la estación espacial, con el objetivo de «comparar las muestras con las almacenadas en una instalación de envejecimiento en tierra para determinar el efecto del entorno espacial en componentes específicos». Los resultados permitirán avanzar en el conocimiento de la evolución de compuestos críticos para la nutrición y el sabor de los alimentos.
La startup luxemburguesa Space Cargo Unlimited mandó las 12 botellas de vino. A bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS), a 400 km de altitud, se han almacenado las 12 botellas de vino de Burdeos durante 438 días y 19 horas. Recorrieron más de 300.000.000 km a 28.800 km/h en gravedad cero (el equivalente a unos 300 viajes entre la Tierra y la Luna). También se almacenaron 320 plantas de vid, 50% Merlot; 50% Cabernet Sauvignon durante 312 días y 14 horas, lo que representa 216.057.600 km en gravedad cero (lo que equivale a unos 284 viajes de ida y vuelta a la luna).
Los primeros resultados de la investigación
Desde la firma Space Cargo Unlimited han dado a conocer qué ha ocurrido con las doce botellas de Petrus cosecha 2000 que han viajado hasta la Estación Espacial Internacional y han permanecido allí, hasta su regreso a la Tierra. Así que han decidido desvelar sus primeros secretos.
Sobre los vinos enviados, Petrus es un vino ampliamente conocido por sus precios astronómicos, se elabora en la región vitícola de Pomerol dentro de Burdeos.
En la conferencia de prensa celebrada en el Ayuntamiento de Burdeos, a finales de marzo, Space Cargo Unlimited desveló los secretos del vino que ha pasado 14 meses en la estación espacial internacional como parte de la Misión WISE, el primer programa privado de investigación espacial aplicada del mundo. En el contexto del calentamiento global, Mission WISE pretende aprovechar los efectos de la microgravedad en los sistemas biológicos complejos para encontrar soluciones para la viticultura y la agricultura del futuro.
«Mission WISE pretende avanzar en la investigación de la viticultura tanto como en la elaboración de vinos», afirman Nicolas Gaume y Emmanuel Etcheparre, cofundadores de Space Cargo Unlimited. «Este proceso y el envejecimiento del vino siguen siendo en gran medida un misterio. Al estudiarlos, el padre fundador de la enología, Louis Pasteur, hizo descubrimientos fundamentales en las ciencias de la vida. Hoy, creemos que las características únicas del entorno espacial pueden ayudarnos a continuar esta labor de investigación».
De forma que doce botellas de Petrus se dirigieron a la Estación Espacial Internacional el 2 de noviembre de 2019, con el apoyo técnico de la empresa franco-italiana Thales Alenia Space y la estadounidense Nanoracks. Regresaron a la Tierra el 14 de enero de 2021, a bordo de una cápsula Dragon (SpaceX), antes de llegar a Burdeos para iniciar un programa de investigación y análisis que se extenderá durante varios años.
El primer análisis tuvo lugar el 1 de marzo en el ISVV (Institut des Sciences de la Vigne et du Vin) de Burdeos, que organizó una cata organoléptica dirigida por Philippe Darriet, director de la Unidad de Investigación Enológica del Instituto. Un panel de 12 personas, entre las que se encontraban 5 panelistas familiarizados con las catas profesionales, incluido el propio Philippe Darriet, realizó una cata para describir el vino terrestre y el vino espacial según criterios visuales, gustativos y olfativos.
«Con gran emoción recuperamos en Burdeos, a principios de febrero, las doce botellas de Petrus de la cosecha 2000, intactas y habiendo resistido todos los condicionantes de la preparación, el viaje y el almacenamiento en la ISS», afirma Nicolas Gaume. «Por supuesto, el análisis está todavía en sus primeras etapas, pero los primeros resultados son muy prometedores para el futuro del programa de investigación. Estamos muy entusiasmados».
La elección de Petrus por parte de Space Cargo Unlimited no es casual. Conocido en todo el mundo por sus excepcionales cualidades, Petrus es predominantemente monovarietal y tiene una historia documentada que permite medir los efectos del tiempo que el vino ha pasado en el espacio. Además, consideraron que la añada 2000 ofrece una bella estructura que permitirá apreciar plenamente este impacto.
«Por unanimidad, los dos vinos fueron considerados como grandes vinos, lo que significa que, a pesar de la estancia de 14 meses en la estación espacial internacional, el «vino del espacio» fue muy bien evaluado sensorialmente«, explica Philippe Darriet. Y añade: «Se percibieron diferencias en cuanto al color de los vinos. En cuanto a los componentes aromáticos y gustativos: los dos vinos fueron descritos con un rico vocabulario que atestigua una notable complejidad olfativa y gustativa; se observaron especialmente las dimensiones sensoriales de dulzor, armonía y persistencia».
Entre los comentarios de los panelistas destacan los siguientes:
- «Diferencia de color, el vino espacial tiene una ligera coloración de ladrillo».
- «Tonos rubí con reflejos tipo ladrillo«.
- «En cuanto al color de los bordes, hay tonos de ladrillo, ligeramente más rosados a lo largo del disco».
«La cata y el análisis sensorial de un vino significa su apreciación por la vista, el olfato y el gusto. Estos 3 criterios son los que permiten apreciar, recordar y diferenciar unos vinos de otros, con el objetivo de limitar, en la medida de lo posible, la subjetividad y las ideas preconcebidas», añade Emmanuel Etcheparre, cofundador de Space Cargo Unlimited y coordinador de la investigación para su filial Space Biology Unlimited. «El riguroso protocolo nos permitió desafiar a cada participante en esta cata. No sabían de antemano si estaban catando un vino que había estado en el espacio o que había permanecido en la tierra».
Emmanuel Etcheparre concluye que «se observaron diferencias reales tanto en el aspecto como en el sabor. Para los participantes fue más complicado diferenciar las dimensiones olfativas».
Junto a las doce botellas de Petrus, 320 cañas de vid pasaron 10 meses en la Estación Espacial Internacional, en colaboración con el CNES y la ESA, y regresaron a la Tierra el 14 de enero. A continuación, los sarmientos se sometieron a un análisis microscópico detallado y se plantaron unos días después de su regreso a la Tierra, tanto en los invernaderos del ISVV, donde se estudian bajo la dirección de Stéphanie Cluzet, directora del Programa de Investigación, como en parte en la región de Vendée, en los invernaderos del Grupo Mercier, uno de los líderes mundiales en la producción de plantas de vid y la creación de viñedos, con el que Space Cargo Unlimited ha establecido una asociación estratégica. Al cabo de unas semanas, los efectos de la ausencia de microgravedad en los sarmientos son ya perceptibles visualmente: las yemas y el crecimiento se observan mucho antes que en los sarmientos que permanecieron en la Tierra en condiciones similares.
El espacio y el futuro de la agricultura
Tanto para los sarmientos como para el vino, «aunque todavía es prematuro sacar conclusiones científicas, estas primeras observaciones validan el enfoque singularmente innovador de Space Cargo Unlimited, que consiste tanto en utilizar el espacio como un nuevo entorno de investigación para el futuro de la agricultura, como en capitalizar la vid y el vino, que son un medio increíble para la investigación científica, como ya demostró Pasteur en el pasado», concluyen Emmanuel Etcheparre y Nicolas Gaume.
Las próximas etapas del programa de investigación se estructuran en torno a análisis precisos destinados a identificar la composición de las propiedades bioquímicas del vino que ha estado en el espacio. Esta investigación permitirá identificar las causas determinantes de las modificaciones observadas, lo que es esencial para comprender el impacto del entorno espacial en el envejecimiento de un vino y sus componentes (sabor, aroma, color, polifenoles, fermentación, bacterias, levaduras…).
También se sigue investigando sobre las cañas de vid, en colaboración con la Universidad FAU de Erlangen (Alemania) y el Grupo Mercier, bajo los auspicios del director científico de Space Cargo Unlimited, el Dr. Michael Lebert.
Animados por estos prometedores resultados iniciales, Space Cargo Unlimited está desarrollando actualmente el cuarto experimento del programa de la misión WISE, previsto para el próximo año en la Estación Espacial Internacional.
A la espera de más información sobre los avances e investigación, tanto sobre los vinos como sobre las cepas, es interesante seguir este programa WISE de la misión Space Cargo Unlimited que está desarrollando nuevos modelos y tecnología para abordar el futuro de la agricultura y la alimentación aprovechando el efecto de la microgravedad en sistemas biológicos complejos. La misión WISE es el primer programa integral de investigación aplicada en el espacio, dirigido por el sector privado, destinado a reinventar el futuro de la agricultura.
Compartirán más resultados, pero ¿servirán para mejorar las producciones de la vid y el envejecimiento del vino? Veremos hasta dónde llega todo este esfuerzo y sus frutos.
1 Comment
Deja una respuesta
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
[…] afamada casa Christie’s saca a subasta una botella de Pétrus 2000 que ha viajado al espacio y ha pasado 14 meses a bordo de la Estación Espacial Interna…. Es la primera vez que un vino ha viajado al espacio y el objetivo es estudiar los efectos de la […]