El acuerdo entre la Unión Europea y China sobre el conflicto de los paneles solares, ¿puede tener implicaciones positivas para la investigación anti-dumping y anti-subvención contra los vinos europeos iniciada oficialmente por China?
Los próximos días quizás sean claves para ver la evolución de este proceso ya abierto por el que las propias compañías se presentaban a una inspección, algo recomendable en el caso de tener un importante volumen de exportaciones a China o si esa era la intención en los próximos años, como aconsejaban desde la Federación Española del Vino (FEV).
El 27 de julio ha sido una fecha, puede que para recordar, ya que se ha llegado al acuerdo entre la Unión Europea y China en lo que se refiere al conflicto sobre el precio de los paneles solares chinos, al concertar un precio mínimo sobre las importaciones procedentes del gigante asiático, según informaban Europa Press y otros medios.
El origen del conflicto…
Todo empezó cuando el 4 de junio la Comisión Europea aprobara la imposición temporal de un arancel a los productos del sector de los paneles solares de China. Justo un día después en un comunicado en su página web, el Ministerio de Comercio chino anunció que había recibido una solicitud del sector vinícola doméstico que acusaba a los vinos importados de Europa de entrar en el mercado chino mediante el uso de tácticas comerciales desleales tales como el dumping o los subsidios. Empezaba así el calvario para las bodegas europeas interesadas en este país o que bien ya vendían sus productos allí.
Ante la denuncia por parte de las empresas vinícolas chinas el Ministerio de Comercio constata que «en los últimos años la cantidad de vino importado desde la UE ha aumentado con mucha rapidez» y que «se iniciará una investigación al respecto de acuerdo con la ley». Esta decisión del Ministerio chino se produce un día después de que la CE propusiera imponer un arancel del 11,8 por ciento a los paneles solares chinos durante los primeros dos meses, una tasa que se elevaría al 47,6 por ciento si no había avances en las negociaciones con el gigante asiático.
… Y las consecuencias
A este respecto Expansión el 25 de julio titulaba un artículo de una forma tan contundente como esta: «China tiende una trampa legal a las bodegas españolas«, donde recogía que cerca de 300 compañías que exportan vino a China se han tenido que registrar en una investigación antidumping para evitar la imposición de aranceles por parte del Gobierno chino.
Desde la Federación Española del Vino (FEV) han tomado una parte activa a través del asesoramiento sobre los procedimientos anti-dumping y anti-subsidios en China para sus miembros con mucha información en su web para resolver las dudas que iban formulando las empresas, ya que como indicaban «son muchas las bodegas que se han dirigido a la FEV para ser orientadas en este proceso».
El Ministerio de Comercio de China había prorrogado hasta el el viernes 25 de julio el plazo para que las bodegas europeas, incluidas las españolas, pudieran registrarse ante las autoridades del país asiático en el proceso antidumping y antisubvención iniciado por este último y evitar así tasas elevadas. La FEV contabilizaba 150 firmas españolas ya inscritas, aunque indicaba que la cifra final podía variar.
Las propias empresas exportadoras son quienes deben valorar su interés en registrarse, aclaraba La Razón con información de Efe ofrecida por la FEV. Las registradas pueden ser seleccionadas para la muestra; el procedimiento «es complejo» y exige aportar mucha información general de la empresa, detallar las operaciones que se hacen con China y las subvenciones que se reciben. Si tras la investigación las autoridades deciden imponer medidas, éstas estarían vigentes cinco años y podrían prorrogarse otros tantos; y las compañías podrían aceptar las tasas impuestas o acordar un precio compensatorio al que se comprometerían a exportar.
Las subvenciones existentes en Europa, por las que las autoridades chinas alegan para justificar sus actuaciones, se refieren al esquema de pago único, promoción en terceros países, reestructuración y reconversión de viñedos, cosecha en verde, mutualidades, seguro de cosecha, inversión, destilación de subproducto, restitución a la exportación, almacenamiento de vino y mosto y las ayudas para uso específico y al desarrollo rural. También apuntan a la ayuda fiscal a la inversión en Córcega (Francia), al plan de incentivos regionales (España) y a la subvención a la inversión (Este de Alemania), según recoge La Razón.
El acuerdo de los paneles solares
«Tras meses de negociaciones intensivas, puedo anunciar que estoy satisfecho con la oferta de precio que nos han propuesto los exportadores de paneles solares chinos», hizo saber el comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, en un comunicado publicado el 27 de julio tras el acuerdo. «Esta es la solución amistosa que tanto la UE como China han estado esperando, y creemos que este precio estabilizará el mercado de paneles solares europeos», indicó el comisario.
¿Puede ocurrir lo mismo con el vino?
El 24 de julio el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, aseguró en Pekín que las autoridades chinas «están abiertas al diálogo» para resolver la disputa comercial que afecta a los vinos importados desde Europa al mercado chino. Quizás solo con ver que al día siguiente ya se ha llegado un acuerdo sobre el asunto de los paneles solares deja abiertas las puertas a la esperanza de una posible solución.
«Mi sensación es que las autoridades chinas están dispuestas a encontrar una solución más a través el diálogo que mediante la confrontación, y esto para mí ya es un gran paso», afirmó Ciolos en declaraciones a los periodistas al terminar su visita de dos días en la capital china. En este sentido, según publica en su web La Información vía la Agencia Efe, el comisario indicó que en los últimos días la UE ha enviado un documento a las autoridades chinas en el que se explica cuáles son las medidas de siguen apoyando al sector vinícola europeo y cuáles ya no se aplican.»Estamos firmemente convencidos de que nuestras políticas no afectan al compromiso con la Organización Mundial del Comercio (OMC) y, si las autoridades chinas entienden el sistema que aplicamos, el conflicto se va a resolver», subrayó el alto cargo europeo. Preguntado por si las conversaciones se están desarrollando junto a las que afectan a los paneles solares -otro de los grandes conflictos comerciales entre ambas potencias pendiente de resolución-, Ciolos aseguró que «no se pueden relacionar formalmente» y que, en el caso de los vinos, «China tiene el derecho de pedir información y la UE la obligación de aclarar sus dudas».
Haya relación o no, solo con ver este acuerdo entre la UE y China, nos da la esperanza de que aun pueden alcanzarse más puntos de encuentro y ojalá el del vino sea uno de ellos.
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[…] fin de semana para zanjar otra disputa comercial, la de la venta por debajo del coste real de paneles solares chinos al bloque comunitario. Tras anunciar la Comisión Europea (CE) aranceles temporales sobre los […]
[…] Muchos observadores consideraban que el origen era una represalia de China contra las investigaciones abiertas por la UE contra las exportaciones chinas de paneles solares. […]