La enóloga de Bodegas Acontia, Maite Geijo, ha puesto en marcha su proyecto Vinológico, que fusiona la neuroenología y la gastrofísica para enseñar a elegir y recomendar vinos sin necesidad de ser un experto. A través de esta innovadora iniciativa, se tratan diversos temas que influyen en nuestra percepción del vino, como los aromas, la música de fondo o el sistema límbico.
En el nuevo proyecto de la enóloga de Bodegas Acontia, Maite Geijo, se unen la neuroenología y la gastrofísica para enseñar a elegir o recomendar un vino sin necesidad de ser un experto en la materia. Este concepto innovador se mostró combinando una cata organoléptica y una cata sensorial y contó con una mesa redonda en la que se presentó el libro homónimo del proyecto que estaba conducida por el periodista gastronómico David Fernández-Prada y en la que también estuvo presente la psicóloga Cynthia Santacruz.
La premisa fundamental del proyecto es enseñar a cómo seleccionar y recomendar un vino sin ser un experto y mostrar que la percepción que tenemos de un vino al probarlo está influenciada por la neurociencia y la psicología, y que dicha percepción puede variar en función de diversos factores, como la música ambiente, la luz o incluso nuestro ánimo.
Además del libro, Maite Geijo también tiene previsto impartir charlas y formación sobre este tema en distintas partes de España, como Bilbao, A Coruña, Santander o Gijón. Para empezar presentó este nuevo proyecto “Vinológico” en el Hotel Intercontinental de Madrid en marzo.
Durante la presentación, la enóloga de Bodegas Acontia explicó que cada persona experimenta una sensación única e individual al beber vino y que es importante prestar atención a nuestra propia percepción en lugar de dejarnos influir por la opinión de otros. Como ejemplo, Geijo contó cómo un mismo vino de una misma añada recibió puntuaciones muy diferentes por parte de dos expertos enólogos (una puntuación de 12/20 por parte de Jancis Robinson y una muy, muy alta por parte de Robert Parker).
En el proyecto “Vinológico” se tratan diversos temas que influyen en nuestra percepción del vino, como los aromas, la música de fondo o el sistema límbico. La autora destaca la importancia de la saliva y el pensamiento consciente, y señala que uno de los errores más comunes es el sesgo de confirmación.
La trayectoria de Maite Geijo
Maite Geijo, es sumiller desde los años ochenta. Le encanta la formación, la docencia, y transmitir. Nacida en Valladolid, es enóloga de profesión. Además, estudió un máster en sumillería y cocina en escuelas como la de Paul Bocuse de Lyon.
Fundó su empresa, “Maite Geijo Vinos”, quizás con osadía, en 1992. No había ni siquiera acabado de estudiar enología, y se convertía hace ya 30 años en la primera sumiller bodeguera. Luego remató sus estudios, pero su mente inquieta no le ha permitido estar parada ni un solo minuto. Apostó por el roble español cuando nadie confiaba en él, elaboró vinos de verdejo en Toro para continuar con su irreverencia, y ahora sorprende con el proyecto “Vinológico”. Con él quiere ayudar a potenciar un poder, el de nuestra mente, y además para un buen fin: gestionarla en el mundo del vino, a través de la neuroenología y la neurogastronomía.
Dedicada en cuerpo y alma al mundo del vino, como elaboradora, sumiller y formadora, ahora da un paso más con este nuevo proyecto: Vinológico.
Libro a la venta disponible en este enlace.
