Tenemos dos noticias sobre el consumo de vino en España referido a los hogares españoles, una buena y una ligeramente mala. Por un lado, la que es positiva es que los espumosos y los vinos con DOP ganan cuota de consumo en los siete primeros meses de 2017. La no tan favorable es que hay una caída ligera, pero hay un buen matiz: es con precios algo más altos. Son datos que ofrece el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV) con información del panel de consumo alimentario publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA).
Los hogares españoles consumen más vinos con DOP y cavas, según datos del panel de consumo alimentario publicados por el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama) y que analiza el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv). El consumo de vino en los hogares españoles cayó ligeramente durante los siete primeros meses de 2017, a precios algo más altos. Se ha situado en los 204,5 millones de litros (-1,4%) y en los 511,4 millones de euros (-0,5%). Son solo 2,9 millones de litros y 2,4 millones de euros menos que los registrados en el acumulado a julio de 2016, con un precio medio que pasa de 2,48 a 2,50 €/litro (+0,9%). Un buen mes de julio, con subidas del 8,8% en volumen y del 6,4% en valor y con todos los tipos de vino creciendo en ambos aspectos, suavizó la caída acumulada en el año, resaltan desde el OeMv.
Los espumosos y los vinos tranquilos con DOP rompen con este descenso y ganan cuota en este periodo.
Por productos: vinos con DOP, espumosos y cavas y otros vinos
OeMv explica que en el acumulado a julio, el vino tranquilo con denominación de origen (DOP) lideró el valor del consumo en los hogares españoles con 294,3 millones de euros, el 52,4% de total. Además, gana cuota al crecer un 2,5%, con 7,1 millones de euros más. A bastante distancia aparece el vino tranquilo sin DOP, cuyo valor disminuyó un 3,1% hasta los 118,5 millones de euros, algo más del 20% del total. Esta categoría fue no obstante la más consumida en volumen con 100,4 millones de litros (-2,5%), 2,6 millones menos, seguido el vino con DOP con 76,4 millones (+0,5%). El precio medio del vino con DOP subió un 2% hasta los 3,85 €/litro (+8 céntimos), muy superior a los 1,18 € del vino sin DOP (-1 céntimo), de ahí su mayor importancia en términos de valor.
Los espumosos y cavas ganan presencia en el canal de alimentación al crecer un 18,2% en volumen y un 6,9% en valor, hasta los 11,9 millones de litros (+1,84 millones) y los 53,2 millones de euros (+3,43 millones). Fue el producto que más bajó de precio aunque sigue siendo el más elevado con 4,45 €/litro (-9,6%), 47 céntimos inferior al del acumulado a julio de 2016.
Por último, la categoría “otros vinos”, que incluye los vinos de aguja, los vinos de licor y los vinos con IGP, registró una importante caída del 13,8% en volumen y del 16,9% en valor, hasta los 15,8 millones de litros y los 45,6 millones de euros. Su consumo disminuyó en 2,5 millones de litros y en 9,2 millones de euros, siendo la principal protagonista de la caída global, con un precio medio que pasa de 2,99 a 2,88 €/litro (-3,6%).
OeMv señala: «Por tanto comprobamos que los vinos con mayor valor añadido (DOP, cavas…) están registrando un buen 2017 en los hogares españoles, que sin embargo están reduciendo sus compras de vinos sin denominación, lo que lleva el consumo global a un ligero descenso durante los 7 primeros meses del año».
Según el tipo de envase
Los envases de 75 centilitros (botella estándar) representaron el 55,2% del volumen y hasta el 80,7% del valor total de vino consumido en hogares en el acumulado a julio de 2017, con 112,9 millones de litros (+0,3%) y 412,9 millones de euros (-1,3%), rompiendo con la caída global. El precio medio de la botella de 75 cl. subió en 4 céntimos hasta los 3,66 €/litro, muy superior a la media (2,50 €), de ahí su mayor cuota en términos de valor.
Les siguen en importancia los envases de 1 litro, que se situaron en los 50,5 millones de unidades (-0,3%) por un valor de 47,2 millones de euros (-2%), cifras que suponen el 24,7% del volumen y el 9,2% del valor total. Es el envase más económico, con 93 céntimos por litro (-1,7%). En esta categoría, el envase de cartón lideró el consumo en alimentación con 38,8 millones de litros y 28,7 millones de euros, seguido de las botellas de 1 litro con 8,6 millones de unidades y 14,2 millones de euros, en ambos casos sin grandes variaciones respecto al acumulado a julio de 2016. El precio medio del cartón de 1 litro se situó en los 74 céntimos, siendo el único tipo de envase por debajo de la barrera del euro, mientras que la botella se situó en los 1,65 € la unidad.
Los vinos con mayor valor añadido (DOP, cavas…) están registrando un buen 2017 en los hogares españoles, que sin embargo están reduciendo sus compras de vinos sin denominación, lo que lleva el consumo global a un ligero descenso durante los 7 primeros meses del año.
A continuación encontramos a los envases de más de 1 litro, que pierden cuota en los hogares españoles al caer un 6% en volumen y un 9,9% en valor, hasta los 38,3 millones de litros y los 40,9 millones de euros. Su precio medio bajó un 4,2% hasta los 1,07 €/litro.
Por último, el consumo de vino en envases inferiores a 75 cl. cayó un 18,6% en volumen y un 17% en valor, hasta los 2,7 millones de litros y los 10,5 millones de euros, a un precio medio de 3,81 €/litro (+2%), el más elevado de las cuatro categorías analizadas.
Por procedencia y color
Vinos con DOP
El consumo de vinos con denominación de origen (incluye vino tranquilo, espumoso, aguja y licor) representó el 47,4% del volumen y el 73,6% del valor total de vino vendido en el canal de alimentación, con 97 millones de litros (+0,9%) y 376,2 millones de euros (+1,6%), a un precio medio de 3,88 €/litro (+3 céntimos).
Por subcategorías, el vino tranquilo representó gran parte de las ventas con 76,4 millones de litros (+0,5%) y 294,3 millones de euros (+2,5%); el 99,4% de estas cifras corresponden a vinos españoles, sin apenas cuota para los vinos extranjeros, que además cayeron bastante durante estos 7 meses. El precio medio del vino nacional se situó en los 3,85 €/litro (+2%), y el extranjero en los 4,21 € (+4,5%).
Por colores, el vino tinto es el primero consumido con 56,9 millones de litros (-0,6%) y 223,7 millones de euros (+2,4%), en torno al 75% del total de vino tranquilo con DOP, si bien fue el único que cayó en volumen al ser el único que subió de precio (+3,1% hasta los 3,93 €/litro). Le sigue en importancia el vino blanco, que registró subidas del 2,6%, hasta los 16,4 millones de litros y los 61,2 millones de euros, a un precio medio que se mantuvo en los 3,73 €/litro. Por su parte, el vino rosado gana presencia en los hogares españoles con 3,1 millones de litros (+10,3%) y 9,3 millones de euros (+2,9%), en este caso a precios que bajan un 6,7% hasta los 2,99 €/litro.
Dejando a un lado los vinos tranquilos, los vinos espumosos con DOP ganan cuota en alimentación al crecer un 18,2% en volumen y un 6,9% en valor, hasta los 11,9 millones de litros y los 53 millones de euros. Su precio medio bajó un 9,6% hasta los 4,45 €/litro. Desde bases más pequeñas, el consumo de vinos de licor con DOP disminuyó un 7% hasta los 5,6 millones de litros y los 20,3 millones de euros, a precios estables (de 3,63 a 3,62 €/litro). Un muy buen mes de julio suavizó su caída acumulada. En el lado más negativo, los vinos de aguja con DOP registraron pérdidas del 22,8% en volumen y del 26,7% en valor, hasta los 3 millones de litros y los 8,5 millones de euros, a precios que bajan un 5,1% hasta los 2,79 €/litro.
Vinos sin DOP
Esta categoría representó el 52,6% del volumen total consumido en los hogares españoles hasta julio, con 107,5 millones de litros, y el 26,4% del valor, con 135,2 millones de euros. Los vinos sin DOP pierden cuota al caer un 3,4% en volumen y un 5,8% en valor, con un precio medio que bajó en 3 céntimos hasta los 1,26 €/litro (-2,5%).
El vino nacional también ocupa gran parte de las ventas con 83,5 millones de litros (+3%) y 93,1 millones de euros (+2,7%), rompiendo con la caída global en esta categoría, a un precio medio que se mantuvo en los 1,12 €/litro.
Por colores, el vino tinto representó el 56,6% del volumen y casi el 60% del total, con 56,2 millones de litros (-4,8%) y 67,6 millones de euros (-6,5%), a un precio medio que pasa de 1,22 a 1,20 €/litro. El vino blanco es el único que crece tanto en volumen (+2,4%) como en valor (+6,6%), hasta alcanzar los 36,3 millones de litros y los 37,5 millones de euros, siendo a su vez el único que subió de precio (de 99 céntimos a 1,03 €/litro). Por su parte, destaca la fuerte caída del vino rosado, cuyas ventas bajaron hasta los 6,7 millones de litros (- 11%) y los 7,8 millones de euros (- 21,9%), a precios mucho más baratos (de 1,33 a 1,17 €/litro). Por otra parte, los vinos con IGP, también conocidos como “vinos de la tierra”, cayeron en alimentación un 14,5% en volumen y un 21,6% en valor, hasta los 7,1 millones de litros y los 16,6 millones de euros, a precios que bajan más del 8% hasta los 2,34 €/litro.
Otras bebidas
El OeMv analiza los datos de consumo de otras bebidas en el canal de alimentación y comprueba que las cervezas crecieron en el acumulado a julio casi el doble en términos de valor (+3,6%) que de volumen (+1,9%), al subir su precio medio un 1,6% (de 1,20 a 1,22 €/litro). En cifras absolutas, los hogares españoles consumieron 486,9 millones de litros de cerveza por valor de 592,1 millones de euros.
Por el contrario, cae el consumo de bebidas espirituosas, que se situó en los 17,6 millones de litros (- 3,3%) y en los 183,3 millones de euros (-5,6%), a un precio medio que bajó en 15 céntimos hasta los 10,40 €/litro. Con cifras más moderadas, precios más altos (+7,7% hasta los 2,02 €/litro) elevaron un 1,7% el gasto en sidras, hasta superar los 9 millones de euros, pese a que el volumen disminuyó un 5,6% hasta los 4,5 millones de litros. Un mes de julio bastante negativo empeoró los datos acumulados.
Datos interanuales de consumo: leve descenso en volumen aunque sube en valor
Los datos interanuales abarcan en este caso los 12 meses comprendidos entre agosto de 2016 y julio de 2017, registran un consumo de vino en los hogares españoles de 376,8 millones de litros y 1.023,7 millones de euros. Estas cifras suponen un leve descenso del 0,3% en volumen (-1,23 millones) pero un crecimiento del 2,9% en valor (+29 millones de euros), con un precio medio que sube en 9 céntimos hasta los 2,72 €/litro (+3,3%).
Como ocurría en el acumulado a julio, los vinos con mayor valor añadido fueron los protagonistas positivos en el interanual: el valor de vinos tranquilos con DOP creció en casi 24 millones de euros (+4,4%) hasta superar los 567 millones, y el de espumosos y cavas en 21,3 millones (+16,7%), hasta rozar los 150 millones. En volumen, espumosos y cavas crecieron por encima del 22%, con subida moderada para los vinos tranquilos con DOP (+1,5%), hasta alcanzar los 29,5 y los 170,8 millones de litros respectivamente. En el polo negativo, cae bastante el consumo en la categoría “otros vinos” (-9,8% en volumen y -11,9% en valor), con descensos más moderados de los vinos sin DOP ni IGP (-3% en litros y -1,6% en euros). Esta última categoría mantiene su liderato en volumen (176 millones de litros), aunque con 214,8 millones de euros sigue muy lejos del valor generado por los vinos tranquilos con DOP.
En definitiva, el OeMv remarca que «el consumo de vino en los hogares españoles cayó ligeramente en el acumulado a julio de 2017, a precios algo más altos. Los espumosos y los vinos tranquilos con DOP rompen con este descenso y ganan cuota en lo que va de año«. El vino tranquilo con DOP representó cerca del 60% del gasto total en vino, si bien el vino tranquilo sin DOP supuso casi la mitad del volumen total adquirido en alimentación.
Por tipo de envase, las botellas de 75 centilitros lideran claramente el mercado nacional con más del 80% del gasto total en vino y más del 55% del volumen, creciendo además respecto al acumulado a julio de 2016. Respecto a la procedencia del vino, los vinos españoles “monopolizan” las ventas, mientras que, por colores, los vinos tintos son los más consumidos, seguidos de los blancos, que les ganan cuota, y ya a cierta distancia, de los rosados.
Respecto a otras bebidas, el consumo de cerveza supera ampliamente el de vino en volumen, con menor diferencia a su favor en valor (a la espera de los datos correspondientes al último trimestre del año, cuando tradicionalmente se consume más vino, sobre todo en diciembre). Caen las bebidas espirituosas, mientras que el consumo de sidra ha disminuido aunque la inversión en este producto ha aumentado, al subir bastante su precio.